La reforma del Hospital Nuestra Señora de Gracia (Provincial) avanza al ralentí. A pesar de que el compromiso del Gobierno de Aragón con este centro sanitario está pendiente desde 2005, cuando comenzaron los trabajos, la conclusión de los mismos y la reforma de su unidad de cuidados intensivos siguen en el aire.

De hecho, la zona quirúrgica, cerrada desde 2008, debería haber estado lista esta primavera. Sin embargo, a día de hoy, los cirujanos e intensivistas desplazados a otros hospitales, como el Militar, aún no han podido regresar. Por su parte, la DGA informó recientemente de que se van a invertir 2,5 millones de euros en la construcción de la nueva uci, y anunció que las obras terminarán a finales del primer trimestre de 2011, por lo que será en ese momento cuando, presumiblemente, el centro recuperará totalmente la normalidad.

No obstante, el recelo que se ha generado entre médicos, pacientes y en la oposición es evidente. Los implicados reconocen que la piqueta ha entrado en las zonas quirúrgicas, pero denuncian que se trabaja a medio gas y que difícilmente se cumplirán los plazos.

El portavoz de Sanidad del PP en Las Cortes, Ricardo Canals, criticó ayer que "parece que las obras vuelven a retrasarse de nuevo" y anunció que presentará una proposición no de ley exigiendo que todas las obras pendientes estén finalizadas este año, como garantía de que puedan ponerse en servicio en el primer trimestre de 2011 y de que este equipamiento recupere su papel.

Hace solo unos meses, en octubre de 2009, la Comisión de Sanidad de las Cortes aprobó otra proposición no de ley pidiendo que se mantenga y potencie la cartera de servicios de este centro sanitario.

Vecinos, trabajadores y usuarios del hospital han recogido aproximadamente 50.000 firmas pidiendo que este centro sanitario tenga asignada una población de referencia y que siga siendo considerado como uno de los hospitales más importantes de atención especializada de Zaragoza.