A LA ALTURA DE VILLANUEVA DE GÁLLEGO

Muere atropellado un ciclista en la A-23

Ayer, un anciano murió al ser atropellado en Torrero por una conductora inexperta. La mujer perdió el control al girar en una curva y arrolló al octogenario, que quedó atrapado entre el vehículo y un pivote.

Un ciclista falleció ayer después de ser atropellado en la A-23, a la altura de Villanueva de Gállego. Según informó la Dirección General de Tráfico, el accidente tuvo lugar alrededor de las 15.00, en el kilómetro 301. Fue en ese punto cuando el turismo le arrolló. Ambos iban en sentido a Huesca.


Por otro lado, un anciano perdió ayer la vida en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza cuatro horas después de ser atropellado por una conductora inexperta en el barrio de Torrero. El accidente se produjo sobre las 11.15 en la esquina de la avenida de América con la calle del doctor Ibáñez. Por causas que todavía se desconocen pero que podrían estar relacionadas con la falta de pericia al volante de la mujer, el vehículo remontó la acera y arrolló al peatón, de 82 años e identificado como Alejandro J. M.

Según informó ayer la Policía Local, el hombre quedó atrapado entre el turismo y uno de los pivotes colocados en la acera, lo que le provocó lesiones de extrema gravedad. Sin embargo, pudo ser rescatado todavía con vida y trasladado de urgencia al hospital. Por desgracia, su fallecimiento se produjo solo unas horas más tarde.

La conductora del coche, de 32 años e identificada como Nezha C. C., llevaba el cinturón de seguridad puesto y dio negativo en la prueba de alcohol. Sin embargo, reconoció a los agentes su inexperiencia al volante y les explicó que perdió el control del vehículo al hacer el giro a la derecha para meterse a la calle del doctor Ibáñez.

Se da la circunstancia de que en la esquina donde se produjo el suceso hay un paso de peatones y el bordillo está rebajado, lo que permitió al turismo remontar más fácilmente la acera. Dada su avanzada edad y lo inesperada que fue la maniobra, la víctima no tuvo tiempo de reaccionar. Aunque se movilizaron enseguida las emergencias -incluidos los Bomberos, que se desplazaron en unos minutos con una uvimóvil y un equipo de excarcelación-, las consecuencias del atropello terminaron siendo fatales.

Tres muertos en un mes

El mes de abril está resultando especialmente aciago en lo que accidentes de tráfico se refiere. De hecho, tres personas se han dejado ya la vida en el asfalto en el casco urbano de Zaragoza, y dos de ellas han sido peatones. En lo que va de año, el balance de fallecidos se eleva a cinco.

Hasta el atropello mortal de ayer, la última víctima había sido un motorista de 36 años. El percance se produjo el pasado día 17 en la avenida de Pablo Ruiz Picasso del Actur, cuando, por causas que se desconocen, el hombre perdió el control de su motocicleta, cayó sobre la calzada y terminó chocando contra una farola situada en la mediana. Una uvi móvil de Bomberos le trasladó de urgencia al Hospital Clínico todavía con vida. Sin embargo, su fallecimiento se produjo poco después del ingreso. Aunque en el momento de la caída la víctima portaba el casco reglamentario, se estudiaba si lo llevaba correctamente abrochado.

Solo 24 horas antes, se había producido otro atropello mortal en la calle de Salvador Minguijón. En este accidente, la víctima fue un trabajador de la planta de GM en Figueruelas, que fue arrollado por un turismo al apearse del autobús de la empresa.

Por otro lado, la lluvia provocó ayer el vuelco de un camión en el kilómetro 257,300 de la autovía de Madrid, a la altura de los túneles del término municipal de Morata. Según informó el Centro de Gestión de Tráfico de la DGT, el siniestro tuvo lugar a las 19.20 y el conductor no sufrió lesiones de consideración.

La Guardia Civil ha abierto una investigación para esclarecer las causas de este vuelco, pero todo apunta a que fue el asfalto mojado lo que provocó que el camión patinara e hiciera lo que se conoce como 'la tijera' en los carriles en dirección hacia Madrid. Pese a ello, al no haber ayer demasiado tráfico, no se llegaron a producir retenciones de importancia.