Bodas de plata de lo más solidario

Diecisiete zaragozanos celebraron ayer sus bodas de plata. Fue un aniversario un tanto peculiar, ya que lo que festejaban no eran 25 años de vida conyugal, sino un cuarto de siglo al servicio de la solidaridad colaborando con la oenegé Ayuda en Acción. "Es un pequeño reconocimiento que se hace desde la organización a estas personas", explicó Elisa Iglesia, representante de la oenegé.

Una de las socias homenajeadas fue Begoña Ygartua quien aseguró que, desde su punto de vista, "estas cosas no hay que reconocerlas". Begoña explicó que ella colabora porque considera que eso es lo justo: "De alguna manera tenemos que ceder parte de lo que nos corresponde a otros que lo necesitan más". Lleva medio siglo aportando dinero a la oenegé, pero todavía no ha olvidado la charla de Vicente Ferrer que le animó a hacerlo. "Nos gustaron las ideas, los proyectos, empezamos a colaborar y aquí seguimos", afirmó.

Hace también 25 años la minusvalía que padece Esperanza Martorell no le impidió tomar la misma decisión que Begoña. "Es una cosa muy bonita y me gusta mucho colaborar", aseguró. Su madre lo confirmó: "Es algo que decidió ella, pero luego me arrastró a mí a hacerlo", aunque según señaló, Esperanza no solo contagia solidaridad. "Me hizo lo mismo con el teatro", bromeó.

Begoña y Esperanza son solo dos historias. Pero ayer, en el centro Joaquín Roncal había un centenar de ellas. Ayuda en Acción cuenta con más de 2.500 socios en la provincia de Zaragoza, además de una quincena de voluntarios. Unos 130 acudieron a la reunión celebrada por la tarde para explicar los proyectos que se llevan a cabo gracias a sus aportaciones. Aunque al final de esta reunión también actuaron como 'invitados' a la celebración de las bodas de plata solidarias.

Música y comercio justo

Como maestro de ceremonias actuó Ernesto Magaña, director de la oenegé en Honduras, quien explicó a los asistentes el trabajo realizado para garantizar la seguridad alimentaria en las comunidades de este país. Después llegó el turno de una pareja de voluntarios zaragozanos recientemente llegados de Perú, que también compartieron con los socios su experiencia. Y como en toda celebración que se preste, tampoco faltó ni el 'banquete' ni la actuación musical.

Al comienzo del acto hubo una degustación de comercio justo. El café, las galletas y el chocolate fueron algunos de los productos favoritos de los asistentes. Y el broche final lo puso el cantante Daniel Zueras. Artista, zaragozano y colaborador de Ayuda en Acción, lo tenía todo para ser el encargado de cerrar este reunión. Y lo hizo interpretando una canción popular de Haití que él mismo había versionado.