TERCERA EDAD

El centro de mayores de Gallur admitirá nuevos socios cinco años después

El Club Cervantes se integra en la red de hogares del IASS y mantendrá el comedor.

La inquietud en torno al futuro del Club Cervantes de Gallur parece disiparse. El centro se ha integrado plenamente en la red de hogares de personas mayores del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS). Esto permitirá desbloquear la admisión de socios, un problema sin resolver desde 2005 pese a las demandas de los vecinos y el Ayuntamiento y que estuvo a punto de provocar el cierre del local.

El BOA recoge un anuncio por el que se convoca el procedimiento abierto de la contratación administrativa del servicio de alimentación y el de cafetería del hogar. Es la señal de que se impulsará la actividad del Club Cervantes, que actualmente cuenta con 18 usuarios.

Jesús Sierra, director provincial del IASS, achaca la parálisis a que no funcionaba propiamente como un centro de la DGA. El local, dentro de la antigua estructura, era el único comedor de asistencia social que quedaba en Zaragoza. "Casi estaba condenado a desaparecer", comenta Sierra, quien afirma que ahora será un lugar para "la convivencia y el aprendizaje", con cursos de formación, talleres de memoria, teatro, etc.

Los cambios en el funcionamiento no impedirán que los antiguos socios pierdan sus derechos. Así, a los 18 mayores les seguirán sirviendo la comida y la cena a cargo del IASS. Asimismo, se mantiene el servicio de comedor para los niños de la guardería ubicada en el mismo inmueble. Por su parte, los nuevos miembros del hogar abonarán sus consumiciones directamente en la cafetería.

La planta baja del edificio ha sido reformada, con mejoras en la accesibilidad y atendiendo a los casos de dependencia, para adecuarla a los servicios.

La situación del Club Cervantes era motivo de preocupación en el municipio, ya que no se admitían a trámite nuevas plazas. Los anteriores responsables del IASS planearon cerrar el club en el verano de 2005, como comunicaron al alcalde, Antonio Liz. Los vecinos y el Ayuntamiento siempre han reclamado la continuidad del servicio. Hubo concentraciones, recogidas de firmas y se enviaron cartas a cargos de la DGA y al Justicia. La Agrupación de Asociaciones Vecinales de Gallur espera ahora "que todo vaya por buen camino".