ZARAGOZA

El colapso del túnel de Goya impide a Renfe alargar los regionales de Delicias a El Portillo

La compañía pretendía hace un mes llevar servicios de la línea del Castejón, pero el ADIF se negó porque la vía única está al borde de la saturación con las 74 circulaciones al día actualesMientras, el nuevo túnel de Cercanías entre las dos estaciones sigue cerrado y sin equipar.

El colapso del túnel de Goya impide a Renfe alargar los regionales de Delicias a El Portillo
El colapso del túnel de Goya impide a Renfe alargar los regionales de Delicias a El Portillo

El empeño del Ministerio de Fomento de dejar en vía única el túnel de Goya ha terminado por estrangular el tráfico ferroviario, y con ello las aspiraciones de Zaragoza de lograr que los trenes paren en el centro de la ciudad. El colapso que sufre en la actualidad ya ha impedido a la compañía Renfe alargar las líneas regionales de Delicias a El Portillo, con lo que buscaba hacer más competitivo el ferrocarril.


La compañía pretendía hace un mes prolongar hasta el apeadero únicamente seis servicios de la línea de Castejón, los de mayor demanda en el corredor de la ribera del Ebro, ya que era consciente de las limitaciones. Su petición suponía tres trenes diarios de ida y vuelta, pero el ente público Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) negó de facto esta posibilidad porque la vía única del túnel está al borde de la saturación con las 74 circulaciones diarias que soporta en la actualidad. Solo podía permitir tres circulaciones más (entre ida y vuelta), por lo que la operadora tuvo que desechar sus planes iniciales.


Lo más asombroso es que el tramo de 1,6 kilómetros que separa las estaciones de Delicias y El Portillo cuenta con un segundo túnel ferroviario, que permanece cerrado desde que se ejecutara hace casi dos años y que a estas alturas sigue sin estar equipado.

Un túnel paralelo sin vías

La sociedad pública Zaragoza Alta Velocidad acometió la estructura de este falso túnel, en el que enterró más de 33 millones de euros, para una futura ampliación de los servicios ferroviarios bajo el centro de la ciudad. La idea era dejar la infraestructura lista para no tener que levantar de nuevo la urbanización del barrio del AVE. Sin embargo, el ADIF aún no se ha decidido a tender la vía prevista ni a instalar la catenaria. Tampoco está el desvío necesario para entrar en el apeadero de El Portillo. Además, no se sabe ni cuándo se equipará.


Fuentes ferroviarias consultadas indicaron que solo aprovechando esta inversión ya realizada se podrá multiplicar el tráfico, cubriendo la aspiración de los responsables de Renfe de prolongar todos los servicios regionales. La saturación del túnel ha impedido ampliar el trayecto de las líneas de Arcos de Jalón y de Castejón hasta El Portillo y reducir la frecuencia de los Cercanías, limitada a uno por sentido cada media hora.


Del apeadero parten los trenes de la línea de Teruel (6) y paran los regionales de Huesca-Canfranc (14) y de las líneas de Lérida y Caspe (10), además de los Cercanías (42). En total, 74 convoyes de ancho convencional atraviesan el túnel de Goya, de los cuales solo pasa de largo el nocturno Madrid-Barcelona (ida y vuelta). Salvo los de la línea de Teruel, todos atraviesan obligatoriamente el túnel.


Fuentes ferroviarias explicaron que con este tráfico es imposible reducir la frecuencia de los Cercanías, restringida a un tren por sentido cada media hora pese a que solo requieren ocho minutos para recorrer el túnel ferroviario, desde Delicias hasta Miraflores. En algunos momentos del día incluso emplean doce minutos, ya que tienen que permanecer parados en El Portillo para dejar pasar a regionales.


A estas limitaciones se unen las propias de la estación de Delicias y cuya combinación agrava el problema de capacidad del tráfico ferroviario en Zaragoza. Los trenes de Cercanías solo pueden utilizar un andén de la estación, el único que se adaptó a la altura de los trenes Civia empleados. "Se tuvo que rebajar a 68 centímetros, ya que el resto están a 80", indicaron.


Como la aguja del desvío de los raíles de ancho convencional está en Pikolín, la realidad es que la vía única se extiende hasta las afueras de la ciudad. "Hay cuatro vías, pero a partir de ese punto ya no se puede cambiar el convoy. Y esto unido a la restricción de andenes limita mucho la capacidad real, ya que los trenes también permanecen estacionados en la terminal", indicaron las citadas fuentes.


Los trenes de alta velocidad no sufren el problema, aunque también están condenados a una vía única que en su caso sí está desdoblada desde un principio entre Delicias y El Portillo. La solución de Fomento pasa por que las dos vías del túnel de Goya sean de ancho internacional (la del AVE), aunque se carece de presupuesto y de fecha de ejecución.