ZARAGOZA

Dos 'multacar' combaten ya las dobles filas en las calles de la ciudad

El 'multacar', el vehículo policial que ha conseguido que el Ayuntamiento de Huesca haya duplicado en un año la recaudación por infracciones de tráfico y también ha disuadido a los conductores de dejar el coche de cualquier manera, ya ha llegado a Zaragoza. Desde ayer dos coches dotados con cámaras de vídeo y un ordenador circulan por las calles de la capital aragonesa tratando de detectar los vehículos que transiten sin llevar pasada la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), con matrículas dobladas o que sean robados. Pero, sobre todo, a los conductores que se empeñan en aparcar en doble fila.


El Consistorio explicó ayer que el objetivo de esta nueva herramienta es "lograr mayores niveles de seguridad vial y una movilidad más fluida". "En cualquier caso -señalaron- las infracciones que se detecten desde ayer y hasta el 31 de diciembre no serán sancionadas, sino que se convertirán en un aviso informativo a los titulares del vehículo infractor". Es decir, hasta el 2 de enero los zaragozanos tienen tiempo de irse acostumbrando a ver estos turismos que captan las infracciones conforme van circulando y, al terminar la jornada, vuelcan los datos en la Oficina de Tráfico, los verifican y los tramitan como denuncia. Todo, sin que los agentes pongan un pie en el suelo.


Los coches-vigilante no se distinguen en nada del resto de los que utiliza la Policía Local en Zaragoza salvo por su dotación. Dentro lleva dos cámaras situadas tras el espejo retrovisor y un ordenador instalado en el asiento del copiloto. Fuera, una línea de rayos infrarrojos delante del puente que lleva las luces de emergencia permite captar las imágenes independientemente de las condiciones de luz que haya en el momento de registrar la infracción.


El método de funcionamiento es sencillo: previamente se conecta el ordenador a las diferentes bases de datos que se vayan a utilizar posteriormente. Cuanta más información dispongan, mayor será su efectividad. En este amplio abanico entran desde las matrículas de los coches denunciados como robados, los que no han pasado la ITV, los que no tienen seguro o los que acumulan sanciones pendientes. Una vez introducidos los datos, solo tienen que patrullar las calles de la ciudad y las cámaras irán captando y comprobando las matrículas.


La otra tarea que tienen estos dos 'multacar' es sancionar a los coches que estacionan en doble fila, en carriles de circulación de vías importantes, en los carriles bus y en las paradas de este servicio público.


Diariamente, estos vehículos efectuarán los recorridos que se establezcan desde la Unidad de Motoristas. Por regla general, se dividirá la ciudad en dos zonas y se controlarán las calles más importantes y las especialmente castigadas por las dobles filas.


Las cámaras fotográficas dejarán constancia de las infracciones que se detecten en los recorridos, pero además se grabarán otros datos como la hora, el lugar y los propios del turismo. Al final de la jornada, los policías descargarán la información en el servidor de la Oficina de Tráfico, donde se verificarán los datos antes de dar cuerpo a la denuncia, que se tramitará de manera habitual.


Moratoria de dos meses


De la misma forma que durante unos días los policías han estado poniendo a punto este servicio, el Ayuntamiento deja a los zaragozanos un margen de dos meses para que se vayan familiarizando con este sistema. Los infractores (o a los que les hayan sustraído el coche) se beneficiarán de esta moratoria ya que serán puntualmente informados de la falta que han cometido y de la sanción que deberían pagar, pero no se les multará. A partir del 2 de enero, las irregularidades serán denuncias firmes. El objetivo, según recordaron fuentes del Consistorio, es lograr un efecto disuasorio y erradicar los malos comportamientos que causan problemas en la circulación y de inseguridad vial y que originan numerosas llamadas al 092.