Expoagua tuvo indicios de la falta de solvencia de TBZ varios meses antes de que comenzara la muestra, pero no decidió cortar de raíz el problema. La empresa portuguesa, concesionaria de las licencias de productos oficiales y de la gestión de las tiendas, debe más de un millón de euros a 23 empresas fabricantes de estos productos, unos problemas de pago que comenzaron mucho antes del 14 de junio, día en el que abrieron las puertas del recinto.

A comienzos de marzo, los fabricantes ya tuvieron dificultades de cobro. Suministraron a TBZ productos oficiales para venderlos en la tienda que se instaló en la plaza de España, pero los portugueses no pagaban. Mariana Moncasi, directora general de No Name Products, mandó un mail el 4 de marzo a Expoagua, advirtiendo que empezaron a suministrar productos a TBZ en octubre y que desde entonces no había cobrado “absolutamente nada”. Y ya mostraba su inquietud porque “la bola se fuera haciendo más grande”.

Como estos temores eran generalizados en los fabricantes, Expoagua se puso manos a la obra. El 11 de marzo envió un fax a TBZ porque las “reiteradas irregularidades detectadas hasta la fecha” les generaban “serias dudas sobre el cumplimiento de las obligaciones contractuales con la Sociedad”. En ella, además de exigirle solución al “impago de los licenciatarios”, le pide “acreditación documental del pago a Expoagua” de una factura de octubre de 2007, que vencía el 31 de diciembre de ese año, por valor de 25.476,24 euros.

Es decir, que Expoagua le solicitó a TBZ en marzo que le abonara una deuda que tenía desde diciembre. Solo este hecho ya le hubiera bastado a Expoagua para rescindir el contrato con TBZ, ya que en la cláusula 19 del pliego de condiciones del concurso se recoge la posibilidad de resolver el acuerdo por “retraso en el pago de cánones o cualquier cantidad debida por el operador a la Sociedad -a Expoagua-”.

Además de ese fax, hubo uno más días después en el mismo tono y un tercero, en el que se daba un ultimátum. “Ante la deficiente aclaración llevada a cabo por TBZ”, dice el fax, se le requiere que no más tarde de las 12.00 del 18 de marzo de 2008 remitan “acreditación documental de la regularización de la situación financiera de TBZ tanto con sus licenciatarios como con Expoagua”. Los portugueses pagaron sus deudas, y Expoagua consideró que este hecho valía para que siguieran llevando las licencias y las tiendas.