Casco Histórico será una de las áreas urbanas donde el Ayuntamiento de Zaragoza pretende centralizar las inversiones procedentes del fondo estatal aprobado por el Gobierno de España para los municipios, que, según los cálculos iniciales del equipo de Gobierno PSOE-PAR, supondrá transferir unos 100 millones de euros al consistorio zaragozano.

El consejero municipal de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Zaragoza, Francisco Catalá, ya se ha reunido con todos los tenientes de alcalde y jefes de área para buscar todos los proyectos que necesita la ciudad y fundamentalmente aquellos que requieren de una rápida ejecución.

El próximo día 9 hay prevista una nueva reunión para concretar los proyectos ya que todas las peticiones de obras se deben presentar al Gobierno de la Nación entre el 10 y el 23 de enero y estar preparadas para su comienzo antes del mes de abril.

La ejecución de los trabajos se centrará en 2009, si bien existe una posibilidad de prórroga de seis meses que permitirá al Ayuntamiento de Zaragoza afrontar algún proyecto de mayor envergadura hasta los 5 millones de euros, el importe máximo que autoriza el Gobierno. Aunque Zaragoza centrará sus inversiones en el Casco Histórico, Catalá ha asegurado que los barrios "también serán los grandes beneficiados".

Este fondo "va a ser un balón de oxígeno" que posibilitará acometer obras de infraestructura en calles, plazas y parques y de equipamientos demandados por las asociaciones vecinales.

El consejero municipal de Economía está dispuesto a negociar los proyectos con la oposición, si bien ha recordado que la potestad es de la Junta de Gobierno y no del pleno, en alusión a la moción de CHA que mañana se debatirá y que incluye un listado con los proyectos que este grupo cree que se deberían benefeciar.

Son proyectos, ha explicado el portavoz de CHA, Juan Martín, en una rueda de prensa previa, que ya están elaborados y han estado "durmiendo el sueño de los justos en un cajón". Con los cien millones del Estado y los cien que se incluirán en los presupuestos de 2009, Catalá cree que la ciudad podrá afrontar un nivel de inversión importante y luchar por la creación de empleo, premisas principales del fondo local aprobado por el Gobierno y que en el caso de Zaragoza podría suponer el empleo de unos 5.000 trabajadores.

No obstante, para poder complementar ambos paquetes de inversiones, Catalá ha reconocido que será necesario prorrogar los presupuestos de 2008 unos dos meses, es decir, que su intención es que los de 2009 estén aprobados de forma inicial en enero y definitiva en febrero.