Las sanciones por infracciones urbanísticas se disparan y duplican ya las de 2007

Una sanción de 30.000 euros por construir dos soleras de hormigón y dos casas de madera prefabricadas en suelo no urbanizable especial de protección del ecosistema productivo agrario del regadío en el barrio de Peñaflor o 3.000 euros, por vallar una finca rústica. Son solo dos de las multas más recientes que Urbanismo ha interpuesto a varios particulares y que recogen, ahora con más frecuencia, los ordenes del día de la Gerencia. Pero hay más.

Hasta octubre, se han puesto sanciones a los ciudadanos por cometer infracciones urbanísticas por valor de 4,4 millones, más del doble que en todo el año pasado y el triple de las previsiones iniciales. El presupuesto preveía recaudar 1,5 millones de euros en los doce meses de 2008, por lo que, actualmente, existe un exceso de 2,9 millones.

No obstante, las arcas municipales no reflejan los mismos datos. El Ayuntamiento solo ha logrado cobrar un 10% del total, es decir, 474.342 euros, mientras que todavía están pendientes sanciones por valor de 3,9 millones. Una de las razones podría residir en las alegaciones de los ciudadanos, que retrasan el pago y, en algunos casos incluso, llegan a anularse.

En 2007, se pusieron multas por la mitad del valor de este año, es decir, 2,3 millones, pero como en este caso, solo se recaudaron 525.060 euros. Las previsiones entonces eran de 1,1 millones, por lo que a final de año, se duplicaron.

Acristalar una terraza, instalar un aparato de aire acondicionado en casa o acometer una obra sin licencia son algunas de las cuestiones que se penalizan con cuantías que oscilan entre los 3.000 y los 30.000 euros. Son los propios vecinos, la Policía Local o la inspección urbanística los que denuncian a los infractores.

No obstante, la normativa para el cerramiento de las terrazas va a cambiar y se podrá acometer en los pisos de más de cinco años. El pleno de diciembre lo aprobará.