ZARAGOZA

El bono anual del servicio Bizi tiene más de 3.000 personas en lista de espera

Todos los días se contabilizan unos 1.000 usos en este servicio de transporte público

El servicio Bizi está funcionando mejor de lo que se esperaba. Tres mil personas están en lista de espera para acceder a los abonos de un año de las bicicletas públicas de alquiler de Zaragoza. Con la implantación de la segunda fase, que ya ha comenzado, y de la tercera se podrá satisfacer toda la demanda. Además, se prevé que el proceso acabe un año antes de lo acordado.


El nuevo transporte "ha sido un éxito", según apuntaron fuentes municipales, que añadieron que se registran alrededor de 1.000 usos diarios. No obstante, esta cifra contabiliza las veces que se coge una bicicleta, por lo que puede ser una misma persona la que alquile varias bicicletas en distintos momentos del día y cada uno de ellos contará como un uso.


El Ayuntamiento también informó de que al principio del verano eran muchos menos los que se decidían a montar en una de estas bicis, mientras que en las últimas semanas se había producido un incremento considerable de los usos. Además, se ha percibido otro cambio en los usuarios. Antes era el fin de semana cuando más bicis se alquilaban y ahora la demanda está repartida de forma equitativa a lo largo de la semana.


La bicicleta es una alternativa y un complemento al resto de transportes en distancias cortas. Este era el propósito inicial del servicio y se ha conseguido, según fuentes municipales. Así lo confirma la media de tiempo de los usos: unos 15 minutos. Esta media se mantiene, en parte, porque los primeros 30 minutos el servicio son gratuitos, después de haber pagado el bono anual o temporal. Transcurrido este tiempo, el coste es de 0,50 céntimos de euro por cada vez que se supera la media hora. Esta cantidad se descarga directamente en la cuenta corriente del usuario.


En total son 10.000 los ciudadanos que disponen de carné anual. Fueron los privilegiados que consiguieron el abono por tan solo seis euros, dentro del periodo promocional del servicio. Ahora el precio casi se ha cuadruplicado. Los próximos costarán 20 euros. También hay disponibles, 500 plazas temporales. Estas son de tres días y hay que pagar cinco euros por ellas. Por norma general, todos los días están agotadas.


Por otro lado, no ha habido ningún acto de vandalismo ni en las bicicletas ni en las en las estaciones. El Ayuntamiento está "muy contento y orgulloso del civismo que han demostrado los ciudadanos", porque no se han producido daños. "La gente es consciente de que es algo de todos y por eso no se estropea el servicio", añadieron fuentes municipales.


El consistorio puso ayer en marcha la segunda fase. La primera actuación consiste en desmontar los módulos de los aparcamientos de las bicis del entorno del meandro de Ranillas para redistribuirlos.


Aunque se van a dejar unos 21 enganches en cada uno para los vecinos de la zona y para la gente que quiera pasear por la ribera. También se van a incrementa el número de bicis hasta las 700 y las estaciones a 70. Más tarde se llevará a cabo la tercera fase, con la que se conseguirá tener 1.000 unidades y 100 estaciones.


Con un año de adelanto


En un principio se estableció en 2010 la fecha límite para terminar de instalar todas las infraestructuras necesarias, sin embargo, el consistorio cree que será posible concluir en 2009, un año antes de lo previsto. Según afirmaron, "la población ha aceptado muy bien el servicio y cada día hay más interés".


Por el momento, se han colocado las estaciones para dejar y coger las bicis por el centro de la capital aragonesa y por las riberas. Pero paulatinamente, se va extender por toda la ciudad. Hasta ahora no es factible porque no se dispone de la infraestructura necesaria -ni en número de bicicletas ni de estaciones- pero está previsto que esto suceda cuando se terminen todo el proyecto.


Además, la distancia entre los aparcamientos de este servicio no puede ser excesiva, ya que de lo contrario ocasionaría un contratiempo entre los usuarios cuando una de los aparcamientos estuviese completo y tuviesen que ir a otro. Fuentes municipales apuntanque pretende ser "más que una alternativa, un complemento al resto de servicios públicos", por eso se penaliza, con tres euros, a las personas que tienen la bici durante más de dos horas.