BALANCE FINAL

Y después de la Expo, ¿qué?

El recinto de Ranillas, que ha albergado la Expo durante estos últimos tres meses, sufrirá una reconversión total para darle una salida real a la gran inversión que ha supuesto por parte del Ayuntamiento y del Gobierno central. El uso primordial será empresarial, aunque también tendrá lugares de ocio y de restauración.

Tras la clausura de la Expo, comenzará el desmontaje de los pabellones participantes, que tendrán de plazo hasta el 30 de diciembre para retirar todo el material de sus espacios. Muchos de ellos optarán por vender estos contenidos en vez de llevárselos de vuelta a sus países de origen.


El parque empresarial diseñado se situará en los edificios de la Avenida 2008, la llamada Ronda del Rabal. Pero la reconversión de éstos en oficinas no se llevará a cabo hasta el año que viene. De momento, solo seis clientes han firmado para reservar su sitio en Ranillas: Master D, Grupo Jorge, DKV Seguros, Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales, Centro Territorial de RTVE y agencia EFE y la DGA. Para mantener sus reservas, tienen que aportar, además del 3% inicial que dieron como señal, un 12% a lo largo de este mes. Con este dinero, la Expo confía en poder empezar a pagar ya parte de las obras en enero de 2009. Será entonces cuando los tres edificios de la Ronda se troceen en doce para un mejor aprovechamiento del espacio.


La imagen cambiará sustancialmente. La actual cubierta verde se mantendrá, pero se abrirán huecos de patios interiores para que entre más luz a las futuras oficinas. Además, las dos plantas actuales de los pabellones se convertirán en cuatro, y las fachadas que ahora son opacas serán de cristal para que sean más dinámicas.


Algunos de los elementos más emblemáticos de la muestra ya están asignados, aunque falta cerrar acuerdos. A lo largo de este mes está previsto que IberCaja y la CAI firmen la cesión del Pabellón Puente y de la Torre del Agua. Además, se espera que el pabellón de España se convierta en sede del futuro centro de investigación del cambio climático, y el de Aragón, en la Consejería de Educación.


Zonas de ocio


Junto a la zona empresarial se conservará el frente fluvial, donde están las plazas temáticas. Esta zona va a mantenerse como un importante nexo de unión entre las riberas y el Parque Metropolitano del Agua. Aunque la estructura de las plazas se quedará, sí que perderán sus contenidos que, posiblemente, serán expuestos en otras ciudades. El Ayuntamiento de Zaragoza ya ha sacado a concurso las plazas temáticas Sed y Ciudades del Agua para convertirse en un centro de ocio y en un restaurante respectivamente. Inspiraciones Acuáticas está previsto que se convierta en un anfiteatro verde y en una pista de patinaje.


Los talleres infantiles continuarán con sus instalaciones pensadas para los más pequeños, así como la pérgola de círculos que protege del sol a los visitantes, aunque se le quitarán los surtidores que expulsan agua pulverizada. También se piensa conservar las instalaciones artísticas "Bosque sonoro" y "Laberinto del agua" en su ubicación actual.


Para completar la urbanización del parque empresarial, se ha pensado en crear hasta diez mil metros cuadrados de tiendas y restaurantes tanto para trabajadores como los visitantes que acudan a ver el Acuario o el Parque Metropolitano, que se situarán en el corazón del recinto.


La reconversión del recinto de Ranillas en parque empresarial, diseñado por el estudio Lamela, requiere de una inversión inicial "mínima" de entre 120 y 140 millones de euros y cerca de dos años de obras.