ZARAGOZA

El Ayuntamiento plantea un recorte en obra nueva e inversiones para 2009 de casi un 40%

Catalá envía una carta a los responsables de cada área, exponiendo la difícil situación que atraviesa el consistorio.

La fuerte crisis económica también está afectando al Ayuntamiento de Zaragoza, que plantea una importante reducción en inversiones para 2009 de casi un 40% respecto al año pasado. Se pasa así a destinar a obra nueva apenas 111 millones de euros, cuando en los dos últimos años se habían reservado a los capítulos 6 y 7 del presupuesto más de 180 (una gran parte a proyectos relacionados con la Expo).


Atendiendo a este montante tan limitado, el concejal de Economía y Hacienda, Francisco Catalá, ha remitido a los responsables de las diferentes áreas del consistorio una carta exponiéndoles la difícil situación de las arcas municipales, y en la que se les pide que ajusten lo máximo posible sus pretensiones económicas para los presupuestos municipales de 2009. Precisamente, con estas indicaciones, los concejales tendrán que presentar antes del día 10 de septiembre en el servicio de presupuestos su solicitud de créditos para el año que viene.


En la circular remitida por el Área de Economía, se explica que el Plan Económico Financiero, diseñado por el Ayuntamiento para sanear las cuentas durante los dos próximos años, recoge un presupuesto para 2009 de 746 millones de euros (teniendo en cuenta el incremento en la previsión de venta de suelo), lo que supone una "disminución en relación al 2008 del 8,35%". Se hace hincapié en que, con estas cifras, lo que se intenta es tomar las medidas oportunas de reducción de gastos, "para alcanzar el objetivo de estabilidad presupuestaria en el ejercicio 2010".


Así, este documento fija para 2009 un gasto corriente en los capítulos 2 y 4 (los referentes a gastos corrientes) de 312 millones de euros. Según el Área de Economía, los gastos obligatorios se estiman en 285 millones lo que permitirá destinar en torno a 27 millones al resto de gastos voluntarios, repartidos entre las diferentes áreas. Por lo que en este capítulo también es necesario un recorte que puede oscilar entre el 10% y el 15%, dependiendo de las concejalías.


Esta reducción puede afectar especialmente al funcionamiento de diferentes departamentos, ya que muchos de ellos dependen de este dinero para subcontratar o llegar a acuerdos anuales con otras empresas o asociaciones para gestionar determinados recursos municipales. Y en estas, trabajan muchas personas. A su vez en este gasto también se incluye, por ejemplo, el mantenimiento de algunos equipamientos sociales o culturales.


Diferentes fuentes consultadas por este periódico admitieron el "drástico" recorte que se plantea este año, aunque explicaron que las reducciones iniciales planteadas en este documento siempre son "un punto de partida para empezar a negociar". De hecho, cada área cierra las inversiones individualmente después de muchas reuniones y "tiras y aflojas" con el Área de Economía y Hacienda.


Lo que sí parece cada vez más claro es que el Ayuntamiento de Zaragoza no se enfrenta a su mejor momento económico. A la crisis general de la economía española se unen diferentes factores que hacen que sea muy complicado cuadrar las cuentas municipales. La venta de suelo se ha frenazo drásticamente por la propia situación del sector y se han reducido también así los ingresos que se recaudaban, por ejemplo, a través del Impuesto de Bienes e Inmuebles (IBI) o el que gravan las plusvalías.


Las estrecheces también se deben a los "flecos pendientes" de la fuerte inversión que se ha realizado por la Exposición Internacional de 2008. El propio Catalá admitió en junio que los sobrecostes de numerosas obras y el esfuerzo inversor de los últimos años han abocado a las arcas municipales a una etapa de estrecheces. Quedan todavía por pagar más de 10 millones de euros de IVA, de proyectos tan importantes como el Seminario de Vía Hispanidad o el nuevo Cuartel de la Policía Local, en el barrio de Torrero.


Pero las dificultades del Ayuntamiento pueden agravarse si continúa adelante la propuesta del equipo del ministro de Economía, Pedro Solbes, de reducir por primera vez desde 2004 el fondo estatal para los ayuntamientos. Sabedor de su "particular" crisis, el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, ha sido el primero en plantear un frente común municipal y pedir que el incremento de la financiación de las autonomías no sea a costa de los ayuntamientos.


De momento, el concejal de Economía se ha comprometido a que comparecerá en pleno después de que termine la muestra internacional para presentar un paquete de medidas para combatir la recesión. Una de las principales iniciativas, acordar con la DGA la venta de suelo para construir VPO.