ZARAGOZA

Una avería cierra el Grande Covián y se aplazan más de 800 consultas y pruebas

Una tubería se rompió en la zona de laboratorios y anegó todas las plantas. La DGA espera reabrirlo el próximo lunes

"Por problemas técnicos se suspenden las consultas durante todo el día. Los pacientes se programarán para los próximos días (por correo). Disculpen las molestias". Este cartel podía leerse ayer en la puerta de acceso al centro de especialidades de Grande Covián, el de referencia para todo el sector I. Esta área asistencial atiende ya a una población que oscila entre las 200.000 y las 220.000 personas, de las que 70.500 residen en el Arrabal, unas 55.550 en el Actur, otro nutrido grupo en Parque Goya y varios miles en localidades cercanas a la capital.


Una tubería se rompió en la madrugada del jueves al viernes en la zona de laboratorios, que está situada en la planta tercera del edificio. No obstante, la fuga fue tan importante que el agua terminó por colarse en todos los pisos. En su avance, llegó hasta el sótano, donde están las consultas de radiología. Fuentes del centro sanitario recordaron ayer que el nivel que alcanzó el agua fue tan considerable que incluso afectó seriamente a las máquinas de la zona más baja.


Cuando los profesionales llegaron por la mañana para comenzar la jornada laboral se encontraron numerosas zonas inundadas. Como medida de precaución y seguridad, se cortó el suministro de agua y luz en todo el edificio, ya que no solo habían quedado afectados aparatos, habitaciones y pasillos, sino que había numerosos cables por el suelo.


Lógicamente, la decisión siguiente fue suspender toda la actividad en el equipamiento. A media mañana, se recuperó el agua corriente y los equipos técnicos trabajaban para solucionar el problema, pero la decisión de no abrir el Grande Covián se mantuvo para evitar daños o complicaciones mayores.


El centro avisó por teléfono a todos los pacientes que pudo y que tenían cita para ese día. No obstante, durante la mañana fue incesante el goteo de usuarios que acudieron a su consulta o a someterse a una prueba y se encontraron las puertas cerradas. A ninguno se le dejaba pasar si quiera al interior del hall, donde está la zona de información.


Mesas informativas


A cambio, el centro de especialidades colocó a la entrada, en el pequeño vestíbulo que flanquean las dos puertas de acceso, una mesa en la que varias trabajadoras se afanaban en recoger los datos de los pacientes para citarlos cuanto antes.


"Yo llevo meses esperando una citología y justo me tocaba hoy. Por favor, no me diga que ahora me vuelven a retrasar la cita, porque a mí me da algo", decía con desesperación una de las usuarias que hacían cola frente a la mesa.


Otros intentaban entrar y, muy confundidos, no se explicaban por qué celadores y auxiliares les invitaban a salir fuera. "Disculpen las molestias pero hoy no vamos a poder atenderles, dejen sus datos fuera", les insistían los trabajadores.


Algunos pacientes recibían la noticia con mejor disposición que otros. Unos se habían desplazado desde La Jota o el Arrabal, pero otros llegaban de mucho más lejos, como Santa Isabel y Peñaflor.


El departamento de Salud y Consumo del Gobierno de Aragón corroboró ayer que todo se debió a la rotura de un manguito en la planta tercera, en la zona de laboratorios. "Más por prudencia que por otra cosa, los trabajadores decidieron suspender todas las consultas y la radiología para salvaguardar al máximo la seguridad de los procesos", insistieron las mismas fuentes.


La DGA, no obstante, enfatizó que los pacientes que han quedado pendientes serán citados de nuevo en unos 15 días, evitando al máximo los retrasos.


Por otra parte, la previsión es que toda la actividad pueda reanudarse a partir del lunes que viene. Al menos, con esa meta se trabajaba ayer por la mañana.


Críticas de los pacientes


Numerosos pacientes a las puertas del centro de especialidades y asociaciones de usuarios lamentaron ayer lo sucedido y recordaron que este equipamiento está, a su juicio, "bastante abandonado".


"Desde hace años vemos cómo el centro está lleno de grietas y eso que es bastante nuevo. Parece que, como está lejos del centro de la ciudad, tiene menos importancia que el resto, como le pasa al hospital Royo Villanova", decía Magdalena Muriel.


También Teresa García Maldonado, vicepresidenta de la Asociación Informacu, recordó los fallos del equipamiento. "Desde que se abrió no ha mejorado nada, y eso que ya nació con defectos. Lo único que se ha hecho es ampliar una consulta de traumatología", concretó.


Desde hace semanas, se están reparando las grietas que llenaban el edificio debido a los fallos estructurales con los que se construyó.


Es cierto que el centro es relativamente nuevo. Está ubicado en la avenida de Cataluña y comenzó a ser construido entre 1990 y 1991, pero no abrió sus puertas hasta más de cuatro años después. Costó unos 700 millones de las antiguas pesetas. Está ubicado en una de las zonas de mayor expansión, en el mismo sector sanitario que los hospitales Royo Villanova y Provincial.