EXPO 2008

El precio de los alquileres llega hasta 500 euros la noche por el efecto Expo

Los arriendos por días o semanas, típicos de las zonas turísticas, aparecen por primera vez en la ciudad. El sector espera que el mercado se normalice tras la muestra.

El tirón económico que conlleva la Expo ha alcanzado de lleno al sector inmobiliario. Las reglas que hasta ahora regían el alquiler de pisos en Zaragoza y su zona de influencia se han roto por completo. Según José Manuel Vallés, presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (APIs), "estamos ante un alquiler de tipo turístico que nunca se había dado en nuestra ciudad".


Los propietarios, conscientes del aumento generalizado de la demanda que conlleva la celebración de la muestra, han disparado los precios y fragmentado la oferta. Simulando a las inmobiliarias de las zonas turísticas, los particulares ofertan sus pisos por periodos de tiempo inusuales en la capital aragonesa: meses, semanas e incluso días. De esta forma, se están alcanzando tarifas de 3.000 euros al mes, 1.300 por una semana y 300 por pasar una noche (similar a la tarifa de un hotel de tres estrellas durante la muestra).


Son las cifras más habituales que se pueden encontrar por la red. Sin embargo, algunos casos concretos disparan estos precios. Según el portal Fotocasa.es, el propietario de una vivienda de 60 metros cuadrados en el paseo de Fernando el Católico pide 500 euros por una noche. Y el de un piso de 70 metros en la zona Centro, 2.500 por una semana de estancia.


Se trata de una situación novedosa en la que los propietarios podrán obtener grandes beneficios, eso sí, a costa de una dependencia continua de sus pisos a lo largo de los tres meses estivales. La limpieza y acondicionamiento que tendrán que llevar a cabo cada tres o siete días (son los plazos más solicitados) es un esfuerzo que las empresas inmobiliarias no han querido afrontar. Sea por temor o por desconocimiento, lo cierto es que las agencias no han entrado en el juego, dejando a los particulares vía libre para sacar tajada del pastel, marcando sus propias reglas, fundamentalmente a través de Internet. De hecho, algunas fuentes del sector critican el carácter de ilegalidad que podría envolver a este tipo de negocios, en principio, ajenos a los requerimientos de Hacienda y a ciertos sistemas de control a los que se someten las inmobiliarias.


Subida general en Aragón


El incremento de precios en el alquiler de pisos no se ha limitado a Zaragoza, sino que se ha extendido a toda la Comunidad. Según datos del Instituto Nacional de Estadística, Aragón es la segunda región donde más ha subido este indicador en el último año, un 5,7%, frente a la media nacional que se sitúa en un 4,3%.


El elevado número de trabajadores y las grandes expectativas puestas en el turismo de la Expo, generan un incremento en la población de la capital aragonesa, y por tanto, de la demanda, que acarrean esta subida. Pero no es la única causa. Según Fernando Baena, responsable de Fincas Pinilla, "las condiciones del mercado y el descenso en las operaciones de compraventa hacen que la gente se incline por el alquiler frente a la adquisición de una vivienda". A su juicio, "este incremento de la demanda influye decisivamente en la subida de precios".


Por otro lado, fuentes de la inmobiliaria Inmozara, situada en el zaragozano barrio de La Almozara, señalan que "el alquiler de larga duración está estancado ya que la gente quiere aprovechar el tirón de este verano".


De esta manera, buen número de trabajadores llegados a la ciudad con motivo de la muestra se vieron con serios problemas para conseguir un alojamiento asequible. "Busqué en el periódico y en Internet y tardé más de tres semanas en encontrar algo decente", comenta Javier Arbués, llegado de Barcelona para trabajar en el equipo de Expoagua. "La primera impresión fue muy mala -afirma-. Vengo de una ciudad muy cara y no me esperaba que en Zaragoza hubiera unos precios similares a los de allí". Finalmente consiguió un piso de 50 metros cuadrados por 650 euros al mes. "Había una competencia brutal y los pisos volaban. Tuve suerte de ser el primero en ver el anuncio del piso en el que estoy ahora", concluye.


La incógnita de octubre



La gran pregunta que queda por resolver es qué ocurrirá después de la Expo. Para José Manuel Vallés los precios volverán a su lugar tras la muestra. "Ocurrirá algo parecido a lo que está sucediendo con la venta -explica-. Una vez acabe la euforia, volveremos a los niveles normales".


Por su parte, desde TINSA (Tasaciones Inmobiliarias), su director técnico en Aragón, Rafael Espés, considera que habrá que dar un giro en el mercado del arriendo de pisos. "Habrá que reconducirlo porque ya no será un alquiler transeúnte sino mucho más continuo". A su parecer, "el alquiler se ha convertido en una alternativa a la compraventa y a la vivienda parada, ya que en la situación actual del mercado, no se revaloriza". Eso sí, Espés apunta que para ello habrá que establecer una "oferta coherente con la nueva situación".


Sin embargo, otras fuentes del sector inmobiliario apuntan la posibilidad de un estancamiento de los precios en niveles demasiado altos. Las grandes expectativas creadas para la post Expo, el desarrollo de la ciudad y el salto demográfico parecen argumentos suficientes para tener en cuenta estas predicciones.