EXPO 2008

Expoagua agiliza el montaje interior del Pabellón Puente tras acabar las fachadas

Las redes de climatización e iluminación ya están listas, se ha pavimentado la mitad del suelo y se ha recubierto el 70% del esqueleto. Las máquinas retiran la península del río.

La sociedad pública Expoagua acelera el revestimiento interior del Pabellón Puente tras concluir, a falta de un puñado de piezas, sus espectaculares fachadas. Las grúas ya se han retirado y las excavadoras comenzaron hace unos días a retirar la península artificial de tierra empleada para la construcción del esqueleto metálico, de 5.500 toneladas de peso. Esto permite observar el grandioso apoyo construido en una antigua mejana del Ebro, que descansa a 72 metros de profundidad.


La contratista, Dragados, logró cumplir el objetivo de culminar el pasado fin de semana la instalación de las 8.800 placas de grc (fibra de vidrio reforzado con cemento) que recubren los cuatro cuerpos de la original estructura en forma de gladiolo diseñada por la arquitecta Zaha Hadid. Solo faltan por instalar unas piezas de remate "de cumbrera" situadas en los extremos. Estas últimas se han fabricado a medida en unos talleres españoles.


A principios de abril, un equipo de 235 técnicos se encargaba de dar forma a la estructura, pero se ha reforzado ante la intención de finalizar todos los trabajos en la primera semana de junio. No obstante, aún habrá técnicos de las instalaciones expositivas hasta el mismo día de la inauguración.


Los distintos equipos trabajan día y noche para dar forma al interior. Fuentes cercanas a la obra señalaron a este diario que se ha colocado el 70% del pladur de formas sinuosas, que llegará a alcanzar los 9.300 metros cuadrados. Las piezas se fabricaron en Quinto y se moldearon en un taller de Italia. Al mismo tiempo que se cose al esqueleto metálico, se pinta con mimo: las placas reciben siete manos de pintura para darles un aspecto escultural.


También se ha pavimentado más de la mitad de la pasarela, que alcanza los 280 metros de longitud y de una anchura variable de entre 5 y 30 metros, en las márgenes de La Almozara y Ranillas, respectivamente. Los 6.300 metros cuadrados del suelo son de hormigón, cuya última capa se mezcla con una resina de poliuretano para darle "brillo, resistencia e impermeabilidad".


El sistema de climatización se probó con éxito antes de que el edificio central de frío y calor de Ranillas iniciara el suministro la semana pasada. También ha concluido la instalación de la luz indirecta que lucirá en la pasarela, que estará garantizada con 1.800 luminarias traídas de Alemania.


La fase de revestimiento se compatibiliza desde hace semanas con la de montaje de los contenidos expostivos, que ocuparán la planta superior. La propuesta es audiovisual, por lo que se han tendido kilómetros de cables y se han colocado los soportes de las pantallas. Un equipo de ocho técnicos del despacho de Zaha Hadid y de la ingeniería Ove Arup revisan todo el puente para corregir fallos de terminación.