ZARAGOZA

La reforma del Ciclón se retrasa por la falta de acuerdo de los propietarios

El Ayuntamiento pintará el pasaje de forma subsidiaria ante la cercanía de la muestra.

El Pasaje de la Industria y del Comercio de Zaragoza, conocido como el del Ciclón, se encuentra prácticamente abandonado desde hace años. La falta de acuerdo entre los propietarios para reformarlo ha obligado al Ayuntamiento a tomar la decisión de adecentarlo de forma subsidiaria ante la cercanía de la Expo. Por su situación, en plena plaza del Pilar y con salida a la calle de Alfonso I, será lugar de paso de miles de turistas durante la inminente Expo 2008, por lo que el Área de Fomento y Turismo ha decidido actuar.


Su responsable, la concejal aragonesista Elena Allué, señaló que hay que "lavar la cara" de este céntrico espacio con motivo de la muestra, pero incidió en que lo importante es dinamizar la galería, para lo que se encargó un estudio a una empresa para que analizara las alternativas. Una vez terminado, el proyecto fue entregado a los dueños de los seis locales, la mayoría vacíos, que hay en el pasaje. Cualquier decisión debe ser consensuada con ellos al tratarse de una propiedad privada con servidumbre de paso.


El estudio, que ha tenido en cuenta la estructura en forma de cruz, incluye varias propuestas que podrían llevarse a cabo individualmente o todas a la vez. Así, propone crear un pasaje de la historia; de arte; de demostración de artes (danza, escultura, música, etc.); de gastronomía; y de turismo, con información sobre las comarcas y la transformación de la ciudad. También plantea habilitarla como zona de ocio infantil con juegos y talleres; sede de veladas nocturnas con conciertos y cine; e instaurar "la Pasarela Zaragoza". Sería necesaria la iluminación y pintura del pasaje.


El Ayuntamiento es consciente de que no se puede implantar a corto plazo un tejido comercial que impulse la actividad del lugar, por lo que con estos cinco enfoques tratará de suplir esa falta de ambiente.


Pero nada de esto se llevará a cabo si no hay acuerdo entre todos los propietarios. Algunos no son partidarios de colaborar porque, dicen, "no quieren poner ni un duro". Es el caso del abogado Jesús Borra, cuyo despacho está situado en la calle de Santiago, en una de las entradas al pasaje. "Lo quieren arreglar para que quede bien de cara a la Expo pero después lo volverán a abandonar", opina Borra.


Su colega, María Jesús Sariñena, considera que se deberían tomar medidas de conservación y afrontar el problema de fondo, que es, según ella, la ausencia de puertas que permitan cerrar el pasaje por la noche.


Desde el Ayuntamiento aseguraron que si hay consenso, la dinamización del Ciclón se financiará con las arcas municipales. Todavía no hay un presupuesto, pero fuentes municipales dijeron que será asumible ya que no se trata de una gran obra.


Lo que sí correría por cuenta de los propietarios es el lavado de cara, es decir, la limpieza de las fachadas y techos. En ese punto es donde no todos están de acuerdo.


Quien sí está dispuesta a colaborar es María Pilar Ginés, dueña de la galería de arte que lleva su nombre. Es consciente del grave deterioro que sufre el pasaje y está abierta a cualquier posibilidad.


Al tratarse de una propiedad privada pero con servidumbre de paso, María Pilar considera que igual que el Ayuntamiento limpia las calles por las que transitan los peatones, debería encargarse de la limpieza del pasaje, por el que también pasa la gente.


Cerrarlo y poner vigilancia


Además, algunos vecinos han planteado la posibilidad de que la galería se cierre por las noches o de que esté vigilada. "Entran vagabundos, que duermen aquí, y borrachos que lo ensucian todo", asegura María Pilar. Considera que si lo arreglan pero no lo controlan, volvería a deteriorarse.


El Consistorio ha escuchado sus peticiones y desde Turismo explicaron que si no se consigue el consenso necesario para llevar a cabo el plan de dinamización, se encargarán de la limpieza. Pero en este caso y como se hace habitualmente, los gastos los tendrían que pagar los comerciantes.


"Queremos que cualquier actuación se haga con el consentimiento de todos los vecinos. Es importante dinamizar la zona, darle vida propia y que no haya indigentes", aseguró la concejala de Turismo, Elena Allué. "Es un espacio por el que pasará mucha gente durante la Expo y no puede seguir en este estado de deterioro", concluyó.