Una Feria del Pilar de triunfos, decepciones y cuatro despedidas

La Feria del Pilar que acaba de concluir se recordará por su triunfal comienzo, con tres puertas grandes en otros tantos festejos celebrados, el fracaso de la encerrona de Julián López ‘el Juli’ y las despedidas de hasta cuatro matadores, dos de ellas inesperadas.

Ya en la primera tarde de abono -novillada de la ganadería aragonesa Los Maños, viernes 5 de octubre- se descubrieron las dos caras de la fiesta. Mientras el francés Adrien Salenc salía aupado a hombros, Alejandro Mora era intervenido en la enfermería de una gravísima cornada en el Triángulo de Scarpa. Al día siguiente, en el silencioso adiós de Juan Bautista, el toledano Álvaro Lorenzo repetía éxito, aunque no tan rotundo como el presenciado en el espectáculo de rejones del domingo 7. El repertorio de Diego Ventura, que venía de reunirse con seis toros en Madrid, puso boca abajo La Misericordia y fue premiado con cuatro orejas.

Y casi sin tiempo de asimilar el poderío el hispano-luso, la semana fuerte del serial se inició con la corrida de los matadores aragoneses. Alberto Álvarez e Imanol Sánchez sumaron sendos trofeos (pudo caer alguno más) y Ricardo Torres, en un alarde de vergüenza torera, tomó la decisión de cortarse la coleta al término de la sensacional corrida presentada por El Pilar.

Menos importancia tuvo el ganado traído por El Parralejo el martes, si bien los novilleros en liza (Pablo Mora, Francisco de Manuel y Manuel Diosleguarde) fueron incapaces de aprovechar la noble condición de los manejables y sosetes animales. Los tres jóvenes van directos al apartado de decepciones. También un apático Ginés Marín, que vio puntuar al Fandi y López Simón sin entrar en la disputa. Ocurrió el miércoles 10, antes de que Serranito sustituyese a Jiménez Fortes con una actuación digna en presencia de Antonio Ferrera y Miguel Ángel Perera.

Este último volvió el día de la Patrona y, aunque mejoró sus prestaciones, no terminó de justificar su doble comparecencia. El magisterio de Enrique Ponce se impuso al extremeño y a un desdibujado Diego Urdiales. Desilusionante corrida del riojano. Aunque no al nivel de la goyesca en solitario del Juli.

Por suerte, los aficionados pudieron quitarse el mal sabor de boca en un cierre de feria entusiasta y sorprendente. El final soñado por Juan José Padilla, el calor de los aficionados, amigos y familiares que lo vieron caer y levantarse en esta misma plaza, quedó entumecido por un escueto anuncio en Twitter. "Talavante se retira de manera indefinida", rezaba el mensaje escrito en el perfil oficial del que hasta el domingo era el número uno del toreo actual.

La mejor faena

Precisamente Alejandro Talavante había firmado la que, a la espera de que se entreguen los premios oficiales y con permiso de Álvaro Lorenzo, puede ser la mejor faena del Pilar 2018. Afianzado en la muñeca izquierda más brillante de la última década, el pacense firmó una labor de dos orejas marrada con la espada. Otros aspirantes a salir triunfadores del ciclo son los mencionados Juan José Padilla y Diego Ventura; Deslumbrante, toro de la ganadería El Pilar que fue lidiado por Alberto Álvarez; y José María Manzanares (mejor estocada).