La ganadora de la primera vuelta de las primarias a la Alcaldía de Zaragoza, Pilar Alegría, evitó este lunes hablar de una posible negociación con sus rivales de cara a la segunda votación, que se celebrará el próximo domingo. Tras lograr un 49% de los apoyos del socialismo zaragozanos, afirmó que no tiene previsto cambiar de estrategia.

Preguntada expresamente por si se va a sentar a negociar con Carmen Dueso, con la que se medirá de nuevo el domingo, o con Florencio García Madrigal, respondió: "Yo lo que quiero es sumar a la militancia. El mensaje que dio la militancia fue claro, los acuerdos se los debo a ella".

Al mismo tiempo pidió que se haga "una lectura responsable de los resultados". "Los militantes han hablado muy claro en el proceso de mayor participación que ha tenido el partido en la ciudad", aseguró. Y recalcó que "los militantes no son propiedad de nadie", que toman decisiones "legítimas y autónomas" con el objetivo último de "ganar las elecciones". En cualquier caso lanzó un mensaje de "generosidad" e "integración".

Con sus palabras evidenció que su candidatura no busca a priori acuerdos con Dueso o García Madrigal, que cuentan con el control de dos importantes agrupaciones de la ciudad –Norte y Centro II– y que tienen capacidad para mover un volumen importante de votos. Pero Alegría ha demostrado su gran respaldo, con 779 votos, un 49% del total. Su reto ahora es mantener una movilización tan elevada.

Hay que tener en cuenta que el volumen de voto de Alegría es mayor al que obtuvo Javier Lambán en la capital cuando se enfrentó contra Dueso en las primarias por la secretaría general del PSOE. Y en aquel caso, Lambán tuvo el respaldo de la agrupación de Madrigal, que en ese momento era una de las piezas clave del aparato y del oficialismo. ?

Dueso, que logró un 29% de apoyo en las primarias, se movió con cautela y prefirió esperar y no hacer declaraciones hasta que no se reúna hoy con su equipo de colaboradores. Se limitó a decir que se mantiene en la lucha por lograr la candidatura dado que, como dijo el domingo, no hay un proyecto mayoritario.

Para justificarlo recordó que un 51% de los militantes de Zaragoza han votado las opciones que no están alineadas "con el aparato", frente a la posición de Alegría, que reúne el 49% de la organización. "Hablaré con todo el mundo para tratar de sumar una mayoría de militantes", afirmó. García Madrigal, que quedó descartado el domingo pero que anunció que haría valer su 22% para decidir la ganadora, ayer no quiso atender a este diario.