Los taxistas de Zaragoza han aprobado esta tarde en asamblea extraordinaria continuar adelante con la huelga, al menos, hasta el próximo viernes. La gran mayoría de los profesionales del sector (solo ha habido tres votos en contra) se han mostrado partidarios de seguir con los paros para mostrar su solidaridad con los compañeros de Madrid y Barcelona y su rechazo a las licencias de vehículos de alquiler con conductor, las llamadas VTC con las que trabajan plataformas como Uber y Cabify.

Los taxistas, que hoy se han reunido en la Cámara de Comercio, estarán pendientes de las ofertas que el Ministerio de Fomento pueda hacer mañana a las Comunidades Autónomas (es probable que proponga transferir competencias) para volver a reunirse y estudiar de nuevo su posición en el conflicto. En principio, los paros continuarán hasta el viernes, que es cuando se reúne el Consejo de Ministros, del que los taxistas confían en que salga algún compromiso férreo por parte del gobierno central para reducir las licencias VTC. Solicitan que se cumpla el reglamento y el ratio 1/30, lo que obligaría a retirar en Aragón hasta 110 autorizaciones que se concedieron en su día legalmente. El consejero de Vertebración del Territorio del Gobierno de Aragón, José Luis Soro, se reunirá mañana en Madrid con el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, y el resto de responsables autonómicos en materia de movilidad. Soro explica que estará a favor de la transferencia "siempre que viniera acompañada de dotación económica", por si llegado el caso hubiera que afrontar indemnizaciones.

Con la decisión de continuar con la huelga, la Asociación Provincial Auto-taxi, que engloba al 95% del sector, se alinea con otras entidades semejantes de Valencia o Barcelona, que han decidido también mantener los paros y volver a evaluar la decisión el viernes. En la ciudad condal, como "gesto hacia la ciudadanía", han decidido establecer servicios mínimos. Estos  se siguen respetando en Zaragoza, donde el 10% de la flota presta servicio de urgencia, sobre todo, centrado en ancianos y discapacitados. La huelga transcurre sin incidentes, pero con especial incidencia en algunos terminales de transporte como la estación Delicias o el aeropuerto.

Esta misma tarde la Unión de Consumidores de Aragón (UCA) ha pedido al Ayuntamiento que "extreme la vigilancia para que los derechos de los usuarios no se vean perjudicados". La UCA reclama al consistorio que "vele" para que se atiendan las necesidades de los usuarios con minusvalía o discapacidad u otras personas que necesiten acudir a urgencias hospitalarias, hacer uso de los servicios de aeropuerto y de estaciones de autobús y tren. La organización comenta que "tiene conocimiento de que algunas personas mayores han cancelado citas que ya tenían concertadas en algún hospital".