Clausuran otro conflictivo 'after' latino del Rollo por permitir el consumo de drogas

La acumulación de expedientes y denuncias, tanto policiales como vecinales, ha llevado a la Delegación del Gobierno a clausurar de forma preventiva otro conflictivo ‘after’ latino de la zona de Moncasi. Se trata del Bohemios, local ubicado en la calle del Perpetuo Socorro y al que se atribuye una infracción muy grave por consentir el consumo de sustancias estupefacientes entre los clientes. Pero no es único establecimiento del Rollo que ha tenido que bajar la persiana en las últimas semanas, ya que el Ayuntamiento de Zaragoza ha iniciado otro expediente sancionador por un problema de licencias contra La Perla Negra, en la calle del Maestro Marquina.

La clausura del Bohemios se produjo hace unas semanas, al incoarse un expediente sancionador que podría acarrear a su propietario una multa de casi 10.500 euros. El ‘after’, que abre a las 6.00 con licencia de bar-cafetería, no podrá volver a funcionar hasta que se resuelva el procedimiento, lo que podría llevar incluso un año. Además, según fuentes municipales, sobre este mismo local pesa otro expediente administrativo por "deficiencias" que igualmente le impide abrir hasta abril de 2019.

El propietario de este ‘after’ latino es el mismo que el del bar La Clave, ubicado en la calle de Vasconia y que también fue clausurado provisionalmente el año pasado por acumulación de expedientes. Entonces, el cierre se desencadenó tras un altercado en el bar que permitió a la Policía Local hallar allí cocaína y cannabis.

El resurgir de la histórica zona de ocio de Moncasi está produciendo también un goteo constante de cierres, gracias sobre todo a la presión vecinal y las continuas intervenciones de la Policía. Según informa el Área de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza, otro de los establecimientos que ha tenido que dejar de funcionar –con fecha 25 de abril de 2018– es La Perla Negra, al no aceptarse el cambio de titularidad que presentó el propietario.

La Enagua es otro de los bares del Rollo que más expedientes sancionadores acumula, en su caso, por dispensar bebidas o ‘litronas’ para su consumo en la calle. Con esta práctica, se fomenta el botellón y se multiplican las quejas de los vecinos. Y aunque todavía no hay orden de cierre, esta podría llegar a producirse.