Una rosa roja luce en cada una de las piezas arrancadas en el parque Grande de Zaragoza
El monumento en memoria de las trece mujeres fusiladas en el franquismo fue víctima de un acto vandálico.
Unas hermosas rosas rojas lucen desde este sábado en las piezas que fueron víctimas de un acto vandálico en la glorieta de las Trece Rosas del parque Grande José Antonio Labordeta de Zaragoza.
Se desconoce quién ha repuesto en su lugar dos de las tres piezas que fueron arrancadas y, además, ha colocado simbólicamente rosas rojas en memoria de estas mujeres.
Alejandro Franco, la persona que detectó el acto vandálico sufrido por el monumento y dio aviso de ello a la Policía Local, ha encontrado este sábado las piezas repuestas y las rosas frescas en homenaje a las víctimas.
Cada una de las placas lleva inscrito el nombre de una de las trece mujeres que fueron fusiladas durante el franquismo el 5 de agosto de 1939, recién acabada la Guerra Civil.
Las piezas que amanecieron en el suelo este sábado corresponden a Victoria Muñoz García, de 18 años; Pilar Bueno Ibáñez, de 27 años, y Martina Barroso García, de 24 años.
Los otras diez mujeres fusiladas, todas ellas con edades comprendidas entre los 18 y los 29 años, se llamaban Ana López, Adelina García, Blanca Brisac, Carmen Barrero, Dionisia Manzanero, Elena Gil, Joaquina López, Julia Conesa, Luisa Rodríguez y Virtudes González.
Todo apunta a que se trata de un acto vandálico sin ninguna connotación política, dado que en el entorno de la glorieta de las Trece Rosas han aparecido papeleras tiradas, bancos rotos y lugares de recreo infantil deteriorados.
