Condenado a 22 años de cárcel el hombre que asesinó a su mujer cuando le dijo que se separaba
Un jurado lo declaró culpable de homicidio con las agravantes de alevosía, ensañamiento, discriminación de género y parentesco. Deberá indemnizar con 150.000 euros a los padres de la fallecida y
Veintidós años, seis meses y un día de cárcel. Esa es la condena que deberá cumplir Salvador Gázquez Rico, de 51 años, por asesinar a su mujer, Coral González García, de 44. Esta es la sentencia que el magistrado que presidió el jurado, Juan Alberto Belloch, ha impuesto a este hombre que decidió matar a su mujer por que esta había iniciado los trámites para separarse de él y cortar así una vida de dominación. Deberá indemnizar también con 150.000 euros a los padres de la víctima y estar diez años en libertad vigilada una vez cumplida la estancia en prisión.
El crimen machista lo cometió de madrugada aprovechando que Coral estaba descansando en la cama y le asestó 42 cuchilladas. El tribunal del jurado apreció que, además de la alevosía con la que actuó, pues la víctima estaba completamente indefensa, también lo hizo con ensañamiento, ya que no eran necesarias tantas heridas para provocar una muerte, con lo que aumentó de forma deliberada el sufrimiento y dolor de la que había sido su esposa durante 19 años. El jurado consideró que concurrían, además, las agravantes de parentesco y discriminación de género.
A pesar de las excusas que dio el acusado, como que se sentía humillado o ninguneado por su mujer, el tribunal no le dio ninguna credibilidad y consideró que, al contrario, aceptó en pocos días la ruptura sentimental. Lo que no aceptó de ninguna manera eran los términos económicos de la separación.
Los forenses dejaron claro que el encausado no presentaba ninguna patología o trastorno psicológico que pudiera explicar lo que hizo la madrugada del 16 de diciembre de 2016, lo que sirvió al jurado para descartar una posible atenuante.
La decisión del jurado dejó la posibilidad de imponer una condena de entre 22 años y medio y 25 años. Las acusaciones, tanto la ejercida por el fiscal, la DGA y las particulares, a cargo de las abogadas Altamira Gonzalo y Rosa Fernández, solicitaron la máxima, aunque Belloch se ha inclinado por la otra, como mantuvo la defensa, Javier Notivoli.
