Casa Matachín elabora una nueva gama de productos gourmet para estas navidades
Ofrece platos tradicionales listos para servir o que necesitan un horneado de unos 50 minutos.
La empresa aragonesa Casa Matachín ha preparado una nueva gama de productos gourmet especiales para estas navidades. Esta 'Selección Navidad' abarca desde productos elaborados listos para hornear, hasta platos tradicionales ya preparados para salir a la mesa.
Para estos días especiales Casa Matachín ofrece platos de siempre, como el pavo asado relleno de frutos secos y jamón, el pollo campero asado con trufa y trompetilla, o la pularda asada con foie, cebolla caramelizada, ciruelas y pistachos.
"Contamos con un equipo de I+D+i que nos permite innovar en todo lo que hacemos en nuestro día a día, siempre preocupados por mantener las recetas tradicionales y ofreciendo productos saludables de calidad y con todas las garantías", ha resaltado el director general de Casa Matachín, David Botaya.
Los productos antes mencionados se han de terminar en casa con un horneado de 50 minutos. El cocinero de Casa Matachín, Joaquín Velasco, ha indicado que además llevan una salsa que marida a la perfección con cada uno de los rellenos. "Uno de los valores añadidos de nuestros productos es que se aprecian cada uno de los sabores del relleno. Existe un perfecto equilibrio entre los ingredientes que lo componen".
Otros cinco productos han llegado al mercado estas navidades, entre los que se encuentran rellenos, redondos, rotis o croquetas, que se añaden a los productos elaborados de consumo diario de Casa Matachín a base de pollo y pavo, con más de sesenta referencias en el mercado.
La pularda, el pavo y el pollo campero se pueden encontrar en carnicerías o pollerías de proximidad. El resto de productos gourmet también se comercializan en supermercados e hipermercados.
Desde 1990
Casa Matachín, fabricante y especialista en productos elaborados derivados de la carne de pollo y pavo, con sede en Mercazaragoza, comenzó su andadura en 1990. La firma se constituyó cuando Miguel Botaya abrió un pequeño obrador en Zaragoza donde empezó fabricar este tipo de productos de manera artesanal. Un cuarto de siglo después mantiene el carácter familiar.
David y Juan Botaya, los dos hijos del fundador, se encargan de la dirección general y de la producción, respectivamente, combinando la filosofía original de la empresa con técnicas modernas de gestión y la implantación de los avances tecnológicos que garantizan la calidad y seguridad alimentaria en todos los procesos.
