“Me llaman a las tres de la mañana por los ruidos y olores de las fábricas”

El barrio del Picarral forma parte de uno de los distritos más poblados de Zaragoza, el del Rabal, que cuenta en la actualidad y según el Padrón Municipal con más de 78.000 habitantes. Este núcleo de población, que nació como barrio en la antigua huerta del Rabal y que vivió su mayor expansión a partir de mediados del siglo XX gracias a la industria, ve cómo esa misma industria que le impulsó es hoy uno de los problemas que más preocupan a los vecinos.Los problemas de olores y ruidos de las fábricas

Javier Artal, presidente de la AVV  Picarral Savador Allende, así lo confirma: “Los vecinos me llaman a las tres de la mañana quejándose por los olores y los ruidos que vienen de las fábricas”. Josefina González, vecina del barrio desde hace 23 años, es una de las afectadas. “Mi casa está al lado de una de las fábricas y en muchas ocasiones el hedor es vomitivo, sobre todo cuando sopla el viento”.

El problema es de raíz, ya que muchas de las zonas residenciales del barrio se crearon en su momento al lado de las fábricas, dado que estas viviendas fueron construidas para los trabajadores de las mismas. El propio Javier Artal dice que “aunque la predisposición por parte de las empresas para paliar el problema es buena, aún queda mucho por hacer”.

Pedro Ramírez, que vive en el barrio desde hace 35 años, expone perfectamente el problema. “Hace unos años se propuso lo que se conoce como el “Plan Aceralia” -Aceralia era una antigua empresa siderúrgica de la zona que ya no está operativa-, que consistía en rehabilitar la zona en la que se encontraba la empresa, pero a día de hoy el plan no se ha impulsado y la zona está totalmente dejada. Hay deshechos de todo tipo, ratas y jeringuillas. Es muy preocupante, ya que a apenas 200 metros viven familias y niños y algún día vamos a tener que lamentar un accidente”, argumenta Ramírez. “Da asco pasar por aquí, la verja está rota y cualquier niño puede colarse”, explica Asunción, vecina de Camino de los Molinos.Mal estado del pavimento en calzadas y aceras

Muchos vecinos coinciden en denunciar esta situación. “Las aceras están impracticables, yo tengo a mi padre en silla de ruedas y sacarlo de paseo por la calle es un problema”, dice Silvia Cal, cuyo progenitor vive en la avenida San Juan de la Peña.  “Muchos compañeros que transitamos y, en mi caso, que vivimos en la zona, estamos preocupados.  El estado de la calzada da miedo”,  comenta Carlos, taxista de profesión y vecino del barrio desde hace 14 años.

Desde la asociación de vecinos, su presidente Javier Artal  pide al Ayuntamiento “una reforma integral del barrio que es realmente urgente”.