Un auto judicial prohíbe la circulación de las bicicletas por cientos de calles de la ciudad

Anula el permiso para ir por viales de tráfico restringido, pero el Ayuntamiento aún puede recurrir la decisión.

Tranvía Zaragoza.
El Ayuntamiento plantea instalar dos carriles bici en el Coso en paralelo a las vías del tranvía
Raquel Labodía

Un auto judicial dictado el pasado 14 de noviembre por el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) prohíbe la circulación de bicicletas por cientos de calles de la ciudad, las consideradas como de tráfico restringido o semipeatonales. Se trata de los viales por los que no puede pasar el tráfico general, pero sí los taxis, los vehículos de carga y descarga o los de los vecinos. Se calcula que son alrededor de un millar el número de calles de este tipo repartidas por casi todos los barrios de la ciudad, aunque la gran mayoría se concentran en el Casco Histórico.


Si el Ayuntamiento decide recurrir esta decisión judicial ante el Tribunal Supremo, podría evitar que el cambio normativo se aplique de forma inmediata. Además, el propio juez apunta que la circulación de bicicletas por estas calles podría ser admisible si se limita al propio sentido del tráfico, es decir, si no se permite que vayan en contradirección, como ocurre actualmente.


Esta resolución judicial arranca con la sentencia que, en abril de 2014, prohibió que las bicicletas circularan por las aceras. Como consecuencia, el Ayuntamiento tuvo que cambiar la ordenanza y, en octubre de ese mismo año, dio una serie de instrucciones para su aplicación.


Una de las decisiones fue determinar que "la bicicleta podrá circular por todas las calles de tráfico restringido", que calculó en alrededor de un millar. Más tarde, en 2015, desarrolló este punto con otras dos instrucciones en las que se incluía un amplio listado de más de 200 viales que habría que señalizar para que quedara claro que los ciclistas podían pasar por allí. El juez dice que estas instrucciones "introducen confusión en lo finalmente resuelto por la corporación municipal".Las bicis por los bulevares

Aunque el TSJA anula totalmente esa decisión, no pone reparos a ese punto "en lo que permite que donde el tráfico sea restringido, quede incluida también la bicicleta en las mismas condiciones y los mismos términos de horario que los demás vehículos". Sí censura en cambio que se consienta acceder a los ciclistas "a calles de uso exclusivamente peatonal" -algo que ahora no permite el Consistorio-, así como que se permita que transiten en dirección contraria en las citadas calles de tráfico restringido.


Además, el auto anula otro de los aspectos de la instrucción de 2014, que es el permiso para ir sobre dos ruedas por los bulevares de Gran Vía, Constitución y Sagasta. No obstante, el propio juez recuerda que el primero de ellos cuenta con espacio ciclista propio, algo que sí consiente, por lo que no queda afectado por la decisión. Además, con la construcción del carril bici de Constitución el Ayuntamiento prohibió transitar en bici por el bulevar, por lo que a efectos prácticos el auto tampoco le afecta. Sí que tendría consecuencias sobre el bulevar del paseo de Sagasta, donde el Ayuntamiento ahora permite que pasen las bicicletas.

Sí a las aceras bici

El juez, en cambio, sí valida que se puedan acotar espacios para ciclistas en las calles peatonales, algo que el recurrente también pedía que se prohibiera. En esta tipología encajarían las aceras bici, como la que se instaló en el paseo de Independencia o la que el Ayuntamiento ha planteado para el Coso junto al eje del tranvía, entre la plaza de España y la calle Teniente Coronel Valenzuela. De igual manera, el auto tampoco accede a la petición de suprimir la circulación por las pasarelas de la ciudad, como la del Voluntariado o la de la desembocadura del Huerva.


La resolución es susceptible de recurso de casación ante el Tribunal Supremo, aunque ayer el gobierno municipal no respondió a las llamadas de este periódico para aclarar si lo hará o no. En caso de que lo haga, el efecto del fallo judicial podría retrasarse. En los últimos meses, el Consistorio ha colocado cientos de señales para aclarar que el paso de bicicletas sí está permitido por las calles de tráfico restringido.

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