"Que un inmigrante presida esta asociación es significativo"

El guatemalteco Eddy Castro coordina el colectivo vecinal de Lanuza Casco Viejo, en San Pablo, desde hace dos años.

Eddy Castro, a unos metros de la sede de la Asociación de Vecinos Lanuza Casco Viejo.
"Que un inmigrante presida esta asociación es significativo"
José Miguel Marco

Es el primer inmigrante que preside una asociación de vecinos en Zaragoza. Eddy Castro, original de Guatemala, cogió las riendas de la Asociación de Vecinos Lanuza Casco Viejo hace dos años, aunque trabaja con el colectivo desde hace ocho. Lo hizo porque quería conocer la ciudad en la que iba a vivir y echar una mano a los vecinos del entorno. En San Pablo, donde ha residido todo este tiempo, pudo acercarse a estas asociaciones, que no existen en su ciudad natal.


El mayor problema del barrio "es que sigue siendo el mayor núcleo de pobreza y exclusión de Aragón". Esto se debe, en su opinión, a que los alquileres están muy bajos. Asunto aparte es la suciedad de las calles, "una constante" que requiere de soluciones creativas. "No hay suficientes contenedores y muchos bloques no disponen de espacio para colocar cubos propios", explicó. A su juicio, hacen falta campañas de educación para los vecinos. Ayer, por ejemplo, desarrollaron un taller de reciclaje, un tema que, reconoció, "no levanta pasiones".


Castro consideró "muy significativo" que un inmigrante coordine esta asociación de vecinos, que en la actualidad tiene entre 100 y 120 socios (30 de ellos activos). No en vano, el 40% de la población de San Pablo es extranjera. "Es lógico. Seguramente se sumarán muchos más", resaltó.


Preside la asociación porque sus compañeros le propusieron "tras años de trabajo". En este tiempo, sus integrantes han demostrado tener un compromiso y una visión que "en pocos lugares se encuentra". Cree, en este sentido, que trasladar este modelo a otras ciudades y países tendría una repercusión "muy positiva".

Las Armas y el Mercado Central

La remodelación del Mercado Central es una de sus grandes preocupaciones, ya que supondrá "un cambio muy significativo". Castro abogó por defender un mercado "con precios accesibles y diversidad de productos". Otro problema es el ruido y la suciedad de Las Armas y sus alrededores. "No es concebible que un espacio público y residencial tenga tantas o más actividades que la plaza del Pilar. Somos el patio trasero de toda la ciudad", lamentó.


Prometió seguir trabajando para encontrar soluciones y confió en que el trabajo que se realice tenga continuidad. "La mayor parte de los asociados a este tipo de colectivos suelen ser gente mayor, pero aquí contamos con muchos jóvenes", aseveró.

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