Menos plazas de aparcamiento y contenedores de residuos desplazados 100 metros más lejos de los bloques de pisos de la vía de la Hispanidad en su lado par. Son algunas de las afecciones que Pedro Navarro, concejal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Zaragoza, ha detallado que causará el nuevo carril bici.

Navarro, que ha estado la mañana de este martes en la citada vía junto con algunos vecinos para denunciar la situación, ha criticado que la “obsesión” de Zaragoza en Común (ZEC) por “meter carriles bici donde no los ha pedido nadie” provoca “problemas y conflictos entre los vecinos”.

El actual proyecto para el nuevo ramal es una prolongación del carril bici que discurre paralelo al eje del tranvía por el paseo de Isabel la Católica. Discurrirá junto a la vía pacificada situada al lado de los carriles principales de la vía Hispanidad.

Frente a la propuesta de ZEC, que considera la “menos inteligente y la menos interesante de todas”, Navarro ha presentado tres alternativas. La primera sería que los ciclistas continuasen hasta el carril bici situado en el lado impar de la vía Hispanidad. Por otro lado, los que quisieran circular por el lado de los números impares, podrían usar la vía pacificada.

“Son muchos ciclistas los que pasan por esta vía porque prácticamente no pasan coches”, ha señalado el concejal popular. Finalmente, la tercera propuesta “si los técnicos del Ayuntamiento de Zaragoza decidieran que es necesario un carril bici unidireccional exclusivo” en ese lado, se podrían retirar unos metros cinco farolas y aprovechar una zona de la acera en la que el pavimento está diferenciado como carril bici.

El edil del PP y presidente del distrito Universidad, Enrique Collados, ha recordado que vecinos y asociaciones “ya protestaron por escrito” ante el Ayuntamiento. Collados ha criticado que este nuevo carril “no es necesario” y ha apuntado que los cerca de 60.000 euros que cuesta podrían emplearse “en obras más importantes y operantes para el distrito”, entre las que ha mencionado una nueva marquesina de autobús en vía Hispanidad o el rebaje de bordillos de las aceras para facilitar la movilidad. “Es tirar un dinero que sería muy importante para otras obras”, ha concluido el presidente del distrito.