Los espacios para bicis en los cruces de Independencia, ocupados por quien no debe

No pocos conductores detienen sus vehículos en estas parrillas adelantadas pese a no poder.



El paseo de la Independencia da cobijo a unos elementos de tráfico únicos en Zaragoza. Se trata de los espacios adelantados para bicicletas pintados justo antes de los pasos de cebra. Estas parrillas de salida están pensadas para facilitar el tránsito ciclista y agilizar el tráfico, ya que los velocípedos tienen una regulación semafórica diferente a la de los vehículos motorizados.


Cuando la mayoría de los conductores deben detenerse ante un semáforo en rojo, quienes pedalean pueden avanzar, siempre que no haya un peatón atravesando la carretera, al enfrentarse al color ámbar. Por eso precisan de un hueco suficiente para continuar con la marcha.


Pero basta con fijarse en el tráfico por la arteria zaragozana para cerciorarse de que no siempre se respeta la norma. Lo habitual es ver cómo los coches, buses y motos invaden el espacio y se detienen sobre él cuando el semáforo está en rojo.


Según la ordenanza de Circulación de Peatones y Ciclistas, estas zonas "tienen como objetivo permitir a las bicicletas reanudar la marcha en cabeza de los vehículos a motor". Infringir el artículo puede acarrear una multa de hasta 36 euros.


Aunque los ciclistas acostumbran a hacer las maniobras necesarias para recuperar el espacio 'perdido', no deja de llamar la atención el escaso éxito de la señal pintada en el suelo.


Desde los colectivos ciclistas se valoran estas áreas como "útiles" para aquellos ciclistas con cierta experiencia y se insta a realizar campañas de concienciación.

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