Un hombre de 41 años y con sus facultades mentales perturbadas fue detenido ayer por la Policía Nacional como presunto autor de un incendio que puso en riesgo a 200 familias y causó cuantiosos daños en su garaje, con capacidad para 298 plazas de aparcamiento, situado junto a la plaza de Europa. El pirómano, identificado como S. D. F. M., fue sorprendido in franganti tratando de prender fuego a una ambulancia estacionada en la calle de Santa Lucía. En el momento de su arresto, intentaba encender un mechero en la boca del depósito de combustible del vehículo, al que previamente había roto la tapa, según fuentes policiales.

Mientras se llevaba a cabo su detención, 23 bomberos se afanaban en sofocar un pavoroso incendio en el cercano garaje del edificio número 1 de la calle de los Diputados, que tiene entradas también por el paseo de María Agustín y la plaza de Emilio Alfaro. El fuego se había declarado sobre las 6.00 en la primera planta del garaje (tiene dos) y una gran columna de denso humo negro subía por la fachada del edificio.

Dentro, cinco coches ardían por completo, una docena más quedaban muy dañados al desprenderse sobre ellos trozos del falso techo del garaje y todos los que estaban aparcados quedaron cubiertos por el hollín. Al mismo tiempo, el elevado grado de calorías fundía el PVC de las tuberías y dejaba dañadas las bajantes y sin agua potable a los vecinos.

El administrador de la finca, Germán Pardiñas, de Gestión Integral Urbana, explicaba en el lugar de los hechos que los daños materiales eran "notables" y que los vecinos habían respondido bien al protocolo de prevención de incendios. "En estos casos, es importante no usar los ascensores y seguir a rajatabla las recomendaciones", manifestó.

Fuentes de Bomberos coincidieron en su apreciación y añadieron que, dadas las dimensiones del inmueble, fue una fortuna que ningún vecino quedara atrapado en el ascensor, puesto que el humo que se desprende en este tipo de incendios es altamente tóxico y muy denso.

"Para nosotros es muy complicado trabajar bajo rasante. Vamos con cámaras térmicas y, como hay tantas calorías, no se puede distinguir dónde hay o no una persona", explicó un bombero.

Ayer, atacaron el incendio por dos de las tres entradas del garaje y aunque apagaron las llamas en unos 20 minutos, tardaron varias horas en ventilar el humo. La Policía Científica se hizo cargo de la investigación y los gremios empezaron a las 12.30 a trabajar para reparar los desperfectos.