Alfonso Alegre, ciclista zaragozano, fue atropellado intencionadamente por el conductor de un vehículo en septiembre de 2014 en el centro de Zaragoza. En febrero se celebró el juicio contra el conductor, Samuel Leria López, de 39 años, que ha sido condenado por un delito de lesiones y un delito contra la seguridad vial de conducción temeraria, con una pena de prisión de un año, tres meses y un día. Además, el acusado deberá indemnizar a Alfonso con 694 euros.

Ambas partes conocieron la sentencia hace unos días. Alfonso está satisfecho con el fallo condenatorio, pero critica que por una cuestión legal el acusado pueda seguir conduciendo. El Código Penal contempla que cuando concurren dos delitos (en este caso, lesiones y conducción temeraria), se aplica la pena del considerado más grave.

"No queríamos que fuera a la cárcel pero sí que le quitaran el carné. Era más sensato y útil para la sociedad. Este hombre ha insultado a ciclistas en más ocasiones. En mi caso, se le aplica la pena de prisión por el delito de lesiones, para el que no se contempla la retirada de carné. Es absurdo que un conductor condenado por atropello intencionado siga conduciendo. Es una situación kafkiana: un atropello involuntario por una imprudencia puede ser castigado con la retirada de carné, mientras que uno intencionado, no", afirma Alfonso, de 35 años, profesor de Economía en el instituto Miguel Servet de Zaragoza y miembro del colectivo Pedalea.

"Es un sinsentido. Cuando concurren dos delitos solo se aplica la pena del considerado más grave. Hay alguna sentencia del Tribunal Supremo en la que sí se contempla la retirada del carné, pero habitualmente se resuelve como ha hecho la jueza en este caso", apunta Pablo Jiménez, su abogado.Cómo fue el atropello

La jueza María José Alegre, del Juzgado de lo Penal número 6 de Zaragoza, considera probados los hechos que denunció Alfonso. El 25 de septiembre de 2014, a las 17.50, Samuel L. circulaba por la calle Eusebio Blasco (entre el Coso y la calle Verónica) y paró su vehículo sobre el carril bici. Alfonso le solicitó que dejara libre el paso y Samuel se aproximó con su vehículo de manera provocadora y le rozó. Alfonso le pidió que hicieran un parte amistoso ante posibles daños en la bici, pero el conductor del coche se negó.

"Alfonso Alegre ante el temor de que Samuel L. pudiera abandonar el lugar, bajó de su bici y fue andando por la calzada por delante del vehículo. En la calle Verónica, Samuel, guiado por el propósito de menoscabar la integridad física ajena, aceleró intentando atropellar a Alfonso. Este, al oír el ruido del motor intentó esquivarle sufriendo a pesar de ello el impacto sobre la parte inferior de su pierna izquierda y un fuerte tirón en la espalda. Tuvo que ser ayudado por una joven para levantarse y fue trasladado al hospital. A consecuencia de ello sufrió cervicalgia postraumática que requirió para su curación tratamiento farmacológico y rehabilitador y veinte días no impeditivos y sin secuelas", señala la sentencia.

El texto también recoge que unos días antes Samuel L. había insultado a otra ciclista en la intersección de la calle Pedro Joaquín Soler y el Coso, muy cerca del lugar del atropello de Alfonso. El 16 de septiembre de 2014 Samuel subió con su vehículo sobre el carril bici y estuvo a punto de atropellar a una ciclista. La mujer le recriminó su actitud. Y este respondió con expresiones como "hija de puta" y "malfollada". En ambos casos, la falta de injurias ha quedado despenalizada, por lo que Samuel no ha sido condenado por estos insultos.Donará la indemnización

"La jueza ha aplicado la ley. Que un conductor condenado por atropello intencionado siga conduciendo es una anomalía que me gustaría que se cambiara. Quiero hablar este tema con los próximos diputados aragoneses que salgan elegidos", señala Alfonso.

Alfonso recibirá 94 euros para cubrir los gastos de fisioterapia y 600 de indemnización, que donará a los colectivos Pedalea y Stop Accidentes.