El Hospital Ernest Lluch de Calatayud ha renovado todas sus camas. En total, 124 camas nuevas que han supuesto una inversión de 246.840 euros para, según el hospital, la "mejora el confort de los pacientes y también la labor diaria de los trabajadores".

Además, 90 de las antiguas camas irán destinadas a un hospital en Bobo Dioulasso en Burkina Faso gracias a un proyecto solidario de una asociación sin ánimo de lucro de Calatayud. El resto se ha repartido entre otras entidades de toda la comarca. Con esta última renovación, termina un año en el que se han invertido más de 50.000 euros en el hospital en reformas, junto a la incorporación de un mamógrafo con estereotaxia y un ecógrafo fruto del convenio con la Fundación Amancio Ortega.