Cuando parecía que, por fin, se iba a vivir un año tranquilo en los accesos a las grandes carpas del Pilar, las dudas sobre la presencia de menores en estos recintos han vuelto a saltar. Las distintas administraciones hacen, a seis días del inicio de las fiestas, distintas interpretaciones sobre la situación legal del asunto. El Gobierno de Aragón mantiene que los menores de edad de más de 16 años pueden entrar –aunque no consumir alcohol–; la Delegación del Gobierno dice que no pueden, salvo que vayan acompañados de sus padres o tutores o se habiliten zonas separadas sin alcohol para ellos; y el Ayuntamiento de Zaragoza solicita explicaciones para saber a qué atenerse.

Esta discrepancia tiene que dirimirse esta semana para ver qué interpretación legal es la que se aplica. Hay que tener en cuenta que cada una de las tres administraciones tiene competencia sobre un cuerpo policial (la Policía Nacional, la Unidad Adscrita de la Policía Nacional y la Policía Local, respectivamente). Por lo tanto, de no llegar a un consenso podría darse la circunstancia de que cada una aplique su propia interpretación de la normativa y, por tanto, genere una indefensión e inseguridad jurídica para asistentes y promotores.

Esta situación afecta especialmente a Interpeñas. Los peñistas llevan semanas vendiendo entradas a menores porque hasta esta misma semana las autoridades les habían informado de que podían hacerlo. En el caso del River Sound Festival del parquin norte, por contra, decidieron mantener la separación de los menores por "la ambigüedad de la normativa", así que no tendrán problema.

El asunto ha estallado esta semana en la Junta de Seguridad Local, donde se reúnen las distintas administraciones, cuerpos de seguridad y de emergencias para preparar las fiestas del Pilar. Allí, la Delegación del Gobierno advirtió de que la normativa que rige sobre las grandes carpas del Pilar es la misma que el año pasado. Por lo tanto, y según confirmaron fuentes de esta institución, "los menores solo podrán acceder a las carpas si en estas hay una separación física que impida su acceso a las barras donde se expide alcohol, o si van acompañados por su progenitor o tutor legal".

El Gobierno de Aragón no lo ve igual. La directora general de Justicia e Interior, María Ángeles Júlvez, señaló que según el criterio del Ejecutivo aragonés "los menores que tengan más de 16 años puede entrar solos a estas carpas porque son espectáculos en vivo, no eventos dedicados específicamente a la venta de alcohol".

La DGA está tramitando un nuevo decreto para regular este tipo de espectáculos que permitirá la presencia de los menores, pero aún no está aprobado definitivamente. Sin embargo, el Ejecutivo aragonés defiende que la reciente modificación legal aprobada por unanimidad en las Cortes para permitir la entrada de menores a espectáculos en vivo se puede aplicar de forma extensiva a las carpas del Pilar. La semana pasada, el Boletín Oficial de Aragón publicó una rectificación de errores con la que se limitaba la presencia de los menores solos en conciertos a los celebrados en "salas de fiestas, discotecas, salas de baile y pubs".

Mientras tanto, el Ayuntamiento –que es quien tiene que dar la licencia a estos recintos– pide que expliquen cómo se tiene que interpretar la ley. El concejal de Cultura, Fernando Rivarés, mandó el viernes una carta al consejero de Presidencia del Gobierno de Aragón, Vicente Guillén, para que "aclare si las personas de edad superior a 16 años pueden entrar en dichos recintos y qué condiciones deben cumplir, conociendo que en dichos recintos se expiden bebidas alcohólicas".

Según diversas fuentes consultadas, esta semana podría haber una reunión entre las partes para aunar criterios, cuando apenas faltarán unas horas para que abran las carpas –los primeros conciertos son el viernes–.

Interpeñas, a la espera

Mientras tanto, el presidente de Interpeñas, Braulio Cantera, dijo que "a seis días del Pilar esto no se puede cambiar", y defendió que venden entradas para menores porque "en todo momento" les han dicho "que podían entrar". Dijo estar "a la espera", pero que a pocos días de las fiestas "no se puede estar así". "Si cambian ahora el criterio sería un caos total y absoluto", dijo Cantera, quien apuntó que la situación creada "es su problema", en referencia a las distintas administraciones implicadas.