PATRIMONIO-ARAGÓN

Xavier Salinas anuncia su próximo relevo al frente de la diócesis de Lérida

Joan Piris Frígola, prelado de Menorca, suena como sucesor en el obispado que retiene los bienes del Aragón Oriental.

El administrador apostólico (obispo en funciones) de la diócesis de Lérida, Xavier Salinas, anunció el domingo su próximo relevo. Salinas, que también es obispo de Tortosa y se hizo cargo de la sede ilerdense en marzo de 2007 por la renuncia de Francesc Xavier Ciuraneta, enfermo de Parkinson, señaló por dos veces durante una ceremonia de ordenación sacerdotal que "posiblemente" ese iba a ser el "último acto" que oficiase como titular de la sede episcopal.


Salinas, que resaltó la "dificultad" de estar al frente de la organización de dos diócesis, afirmóen su homilia que "el nombramiento del nuevo obispo no está lejos" y añadió que por ahora la designación no está decidida. Ayer, comunicó que la Nunciatura Apostólica ya ha remitido a la Santa Sede la terna para que elija su sustituto.


Aunque Salinas no dio nombres, los rumores sitúan dentro de esa terna, en posición destacada, al obispo de Menorca, Joan Piris Frígola. Según informaba ayer el diario leridano La Mañana, también contarían con opciones a hacerse con el puesto el vicario general de la diócesis de Urgell, Joan Pujol, y el mitrado de Vic, Romà Casanovas.


En cualquier caso, sea cual sea finalmente la elección del Vaticano, el próximo obispo de Lérida tendrá que seguir lidiando con el litigio de los bienes del Aragón Oriental. Salinas, aunque no haya seguido la línea de radical oposición al retorno de las piezas de arte que protagonizó su predecesor, tampoco ha resuelto la cuestión a pesar de las sentencias de los tribunales de la Iglesia, siempre favorables a que los objetos sacros regresen a la diócesis de Barbastro-Monzón.


De hecho, en una rueda de prensa que ofreció al poco de ser nombrado administrador apostólico de la sede vacante de Lérida, Salinas ya advirtió que él no tomaría ninguna decisión sobre los bienes reclamados por la sede episcopal de Barbastro-Monzón.


Eso sí, Salinas ha reconocido que no caben más recursos judiciales porque el tribunal de la Rota no ha encontrado argumentos para contradecir la sentencia de la Signatura Apostólica donde se reconoce la propiedad aragonesa de los 113 bienes en litigio y se estipula que sean devueltos. El todavía prelado ilerdense también ha mostrado su contrariedad porque la Asociación de Amigos del Museo de Lérida haya interpuesto una demanda civil, lo que saca el litigio del ámbito eclesial.


Sin embargo, el mitrado, más allá de lo que ha sido resuelto por la Santa Sede, ha insistido en buscar al litigio una salida negociada con la diócesis barbastrense y no ha dado ningún paso para la entrega de las piezas aduciendo la supuesta tutela que sobre ellas tienen el consorcio del museo y el Ejecutivo catalán.


La cuestión es si el administrador del obispado catalán, cuyo relevo se hará este verano, va a dar algún paso más en la resolución del litigio o prefiere mantenerse fiel a sus declaraciones y deja todo el trabajo al próximo prelado de Lérida. Por el momento, los bienes siguen en manos y voluntades ajenas a su propietario.