CIENCIA

Un investigador consigue una plaza fija a los 35 años

El periodo de formación dura de 12 a 15 años que se reparten entre estudiar la carrera, la tesis, el posdoctorado y los programas de especialización.

Un investigador necesita de 12 a 15 años de formación para conseguir un empleo estable. De media, los científicos de la comunidad -al igual que los del resto del país- consiguen una plaza fija una vez cumplidos los 35, tras haber estudiado una carrera, cuatro años de doctorado, otros dos de posdoctorado con estancias en el extranjero y cuatro o cinco más en un programa de especialización. Los investigadores piden más incentivos para que los jóvenes culminen esta carrera de fondo y exigen más recursos y protección durante el tiempo que pasan como becarios.

El Ejecutivo asegura que se ha avanzado mucho y recuerda también que durante los años de formación, los jóvenes cobran becas que en muchos casos están bien remuneradas.

Variedad de contratos

En la comunidad hay más de 5.000 investigadores. La variedad de estos científicos y sus diferentes casuísticas -contratos de distinto tipo, dependientes de diversas instituciones o administraciones...- hacen que sea muy complicado determinar cuántos están con buenos contratos y cuántos en situaciones más precarias.

No obstante, sí se sabe que son muchos los que se están formando y colaborando en proyectos a través de becas y, por tanto, "con remuneraciones insuficientes y con falta de recursos", según los jóvenes investigadores consultados.