Muchos no se habrán enterado, pero ayer hubo jornada electoral en Zaragoza. La convocatoria iba dirigida a los peruanos residentes en Aragón, es decir, a unos 10.000 kilómetros de su casa originaria. El motivo, un referendo relativo al antiguo Fondo Nacional de Vivienda (Fonavi). Un total de 1.400 personas con derecho a voto estaban llamadas a las urnas instaladas en el convento de las Hermanas misioneras eucarísticas de Nazaret. A la sala habilitada con seis mesas electorales se podía acudir de 8.00 a 16.00.

El Fonavi, vigente durante 19 años, tenía como objetivo la creación de viviendas y se nutría de las aportaciones de los asalariados. Los contribuyentes no quedaron muy satisfechos con los beneficios obtenidos, lo que derivó en un texto que abogaba por resarcir a los trabajadores. En las papeletas estaba escrita la siguiente pregunta: "¿Aprueba el proyecto de ley de devolución de dinero del Fonavi a los trabajadores que contribuyeron al mismo?". Los votantes debían marcar un aspa o una cruz en el recuadro del 'sí' (de color verde) o el del 'no' (azul). Antes tenían que identificarse con su DNI peruano y justificar su residencia en una de las tres provincias aragonesas.

La fecha elegida coincidió con los comicios regionales y distritales en Perú. Pero los inmigrantes no votaron para esas elecciones. Sí lo harán cuando se convoquen las presidenciales (es obligatorio).