‘Nodrizas de los montes’ llamaron los botánicos a las hayas por la protección que estos árboles brindan a los suelos, gracias a la nutrición que sus hojas proporcionan al terreno al caer y la sujeción que sus raíces ejercen sobre el suelo. Como especie de hojas caducas, es una de las formaciones boscosas que mayor belleza ofrece durante el otoño, cuando sus ramas cambian el verde por el amarillo, tiñendo de tonos ocres el paisaje.

Por eso, pasear por un bosque de hayas es una propuesta especialmente atractiva en esta época del año. Desde la Hoya de Huesca y proponen una excursión guiada por el hayedo de Peiró para este domingo, 21 de octubre. Este recorrido, con una duración total de 6 horas (ida y vuelta), forma parte del ciclo de ‘Visitas guiadas para descubrir el Prepirineo aragonés’ que organizan desde la comarca.

El punto de encuentro con el guía esta fijado en la señal que indica el camino hacia el pico Peiró, en la carretera que une Arguís con Bentué del Rasal. En este punto comenzará el recorrido, por el que se sigue durante 1,5 km hasta llegar a la senda donde se inicia la subida al Peiró. Desde la organización se explica que el primer tramo de la ruta tiene una dificultad mínima debido a su escaso desnivel, en cambio el siguiente tramo es una senda con una fuerte subida de unos 700 metros. Por esta parte de la ruta acompañan al caminante masas boscosas de pino y boj, que alivian con su encanto el esfuerzo. Es al final de este tramo de subida cuando se llega hasta una zona de llaneo donde se encuentra el hayedo. En el último recodo antes de llegar al bosque aparece ante la vista el pico Peiró.

Este hayedo es el situado más al sur de la provincia de Huesca, y pese a ser una especie que necesita humedad, le permite prosperar  el encontrarse en la cara norte de la sierra y por tanto amparado por la zona de umbría. Se trata de una formación boscosa de gran belleza, con árboles de gran altura, y donde en esta época otoñal el ocre de la hojarasca contrasta con el verde intenso del musgo. Acompañan a las hayas algunos ejemplares de tejo, un árbol muy valorado ancestralmente por su madera, con la que se fabricaban arcos para la caza. Entre las ramas del arbolado podremos atisbar las vistas hacia el valle del Garona y la sierra de Bonés y quizá con un poco de suerte veamos pasar una ardilla.

Quienes lo deseen podrán seguir hasta la cumbre del pico Peiró por un tramo que transcurre ya fuera del hayedo, por una senda de terreno abierto. Desde la cima se goza de una panorámica de las sierras de Caballera, Gratal y Javierre y de las sierras interiores del Pirineo. La ruta de vuelta transcurre por el mismo camino.

Durante la marcha se realizará una parada parra comer. Tanto la comida como la bebida corre de cuenta de los participantes. El precio de la excursión es de 2 euros (gratis para menores de 13 años), que se deben entregar al guía al comienzo de la ruta. Es necesario realizar inscripción previa aquí. Mañana jueves, 18 de octubre, acaba el plazo para reservar plaza.

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