Recorrido de Hoz de Jaca a Biescas, por Santa Elena

El valle de Tena ofrece muchas posibilidades para la práctica montañera y senderista. Si buscamos una travesía de inicio y fin en poblaciones de fácil acceso, que nos regale buenas vistas del valle y nos descubra algunos de sus elementos patrimoniales de mayor interés, ésta es sin duda una de las posibles y más recomendables. Ahora que la primavera ha llegado y los bosques de caducifolias comienzan a llenarse de vida y de color, es un buen momento para planteárnosla.

El itinerario senderista que nos proponemos discurre por el corazón del Alto Gállego, conectando las localidades de Hoz de Jaca y Biescas, el valle de Tena y la Tierra de Biescas. Su primer tramo, entre Hoz de Jaca y Santa Elena, se corresponde con el sendero PR-HU 78, que se abre paso de sur a norte por el fondo del impresionante desfiladero que ha labrado el río Gállego entre las sierras de Tendenera y Telera/Partacua.

Entre Santa Elena y Biescas, la ruta coincidente ahora con el sendero de gran recorrido GR 15. El camino se desarrolla por un terreno abierto, siguiendo un trazado que discurre en paralelo a una canalización. La ruta propuesta consta de innumerables atractivos y visita lugares de gran interés turístico.

Salimos de Hoz de Jaca siguiendo un tramo la carretera que desciende hacia el embalse para dejarla enseguida y tomar un sendero en ascenso y luego una pista que desciende. El camino nos lleva entre tupidos bosques de hoja caduca hasta la misma base de la presa de Búbal, donde se ancla el despoblado de Polituara. Nos adentramos en un hayedo y seguimos, siempre en paralelo al curso del río Gállego.

Pasamos junto a una cantera de pizarra o 'losera' ya en desuso, y atravesamos un curioso puente tibetano sobre el río, que sustituye al puente tradicional desaparecido. La imagen de la ermita de Santa Elena se destaca en la ladera del monte y hacia ella ascendemos por pista, pasando junto a la vía ferrata de Santa Elena y los abandonados búnkeres de la 'Línea P' o 'Línea Pirineos', fallido proyecto franquista de fortificación de los Pirineos. Llegamos así a la pradera donde se ubican la fuente y la mítica ermita de Santa Elena, documentada desde 1253 cuando el rey Jaime II la mandó reedificar. El santuario fue ampliado en el siglo XVIII y restaurado en 2008. Durante siglos tuvo un ermitaño que se encargaba de su cuidado y todavía hoy acoge a lo largo del año cuatro grandes romerías.

Cerca de la ermita, en la cima del monte de Santa Elena, se encuentra el fuerte fusilero de Santa Elena, construcción del siglo XIX que reemplazó como guardiana a la levantada en tiempos de Felipe II (siglo XVII) por el ingeniero Spannochi dentro de la red de fortificaciones que defendían los pasos fronterizos con Francia. De aquella primera podemos ver en una cota más baja los restos de una torre.

En Santa Elena hallaremos también un sendero accesible interpretado que transita de manera llana entre el bosque. Pasado el fuerte se encuentra el famoso dolmen y, junto a él, un calendario celta realizado en años pasados, elementos que, junto con la ermita, nos confirman el espacio sacralizado desde tiempos inmemoriales en el que nos encontramos.

A partir de Santa Elena, el valle de Tena da paso a la Tierra de Biescas. Continuamos por la pista y tomamos un sendero que desciende a la derecha y cruza dos puentes discurriendo en paralelo a un canal de la central hidroeléctrica, que cruzamos varias veces. Llegaremos a la fuente de la Silla, atravesaremos un bosque donde abundan el boj y el acebo y cruzaremos el barranco de Iguarra, y los campos y bordas de Estagüén hasta llegar a la acogedora localidad de Biescas, final del recorrido.

DATOS ÚTILES

Tipo de recorrido: travesía.

Distancia: 13 km.

Horario: 3 h 45 min.

Dificultad: nivel medio.

Desnivel: 210 m+ / 600 m-.

Época recomendada: primavera, verano, otoño.

Acceso: desde Sabiñánigo y desde Broto a Biescas por la N-260, y desde Biescas a Hoz de Jaca por la A-136.

Es una excursión muy versátil. El itinerario sigue el curso del río Gállego y discurre en paralelo a la carretera A-136 que lleva a Panticosa. Podemos acercarnos en vehículo hasta la pradera de Santa Elena, donde hay parquin, lo que permite dividir la ruta en dos tramos de parecida distancia y modificar su sentido si queremos. Así, desde la ermita de Santa Elena tendríamos unos 6 km hasta Biescas y otros 7 km hasta Hoz de Jaca.

Más información en Unpaisdemontañas.es