La voracidad de la cabra montés retrasa la reforestación de los montes quemados

La DGA destina 175.000 euros a revegetar la zona arrasada por el incendio de Aliaga de 2009

La voracidad de las cabras montesas, una especie en expansión en la provincia, retrasa la reforestación de la superficie quemada en Aliaga por los devastadores incendios forestales de 2009. El Gobierno aragonés se dispone a acometer una nueva fase de revegetación de la zona arrasada con cargo al Fondo de Inversiones de Teruel presupuestada en 175.000 euros, parte de los cuales se destinarán a repetir las labores de restauración paisajística que han frustrado las cabras hispánicas o la excesiva pendiente de las laderas replantadas.


La actuación afectará a montes de Aliaga calcinados en un incendio que acaba cumplir el quinto aniversario. La superficie prevista abarca 150 hectáreas, 40 de ellas replantadas por segunda vez debido al «escaso desarrollo» de las plantas utilizadas, según reconoció el Departamento de Agricultura en un comunicado. La densidad prevista es de 1.200 pies por hectárea. Para facilitar el arraigo se removerá el terreno en hoyos de 60 centímetros de profundidad tres meses antes de la plantación.


Con esta intervención, el Gobierno aragonés habrá destinado 5,4 millones de euros a la restauración ambiental de los montes arrasados en el incendio Aliaga-Ejulve, que afectó a 7.200 hectáreas. En las mismas fechas se registraron también graves incendios en Corbalán y Alloza, con 1.000 y 1.580 hectáreas quemadas. El director general de Gestión Forestal, Roque Vicente, señaló que la prioridad es evitar la erosión y recuperar la cubierta vegetal lo más rápido posible.