Llegó el último a una multitudinaria sesión en la que grupos de la oposición y numerosos vecinos le estaban esperando. El alcalde de Alcañiz, Juan Carlos Gracia Suso, inició el pleno de anoche sin hacer referencia a su imputación por un delito contra la seguridad vial tras exceder en más del doble el límite de velocidad en la N-420 el pasado viernes.

El primer edil será juzgado este martes en Teruel por circular a 211 kilómetros por hora en un tramo limitado a 100km/h. Su presencia era muy esperada ayer porque se trataba de su primera aparición pública desde lo ocurrido, sin embargo, no fue hasta el turno de ruegos y preguntas cuando hizo referencia al asunto al ser interpelado por todos los grupos municipales, que le reclamaron que asumiera responsabilidades.

El pleno transcurrió durante más de dos horas con normalidad, punto por punto siguiendo el orden del día, ante la atenta mirada de los ciudadanos. Al final, el primer edil se limitó a reiterar las disculpas que ya emitió el viernes en un comunicado y aclaró que su previsible retirada de carné de conducir no implicará cargo alguno para las arcas públicas.

"Ya dije lo que tenía que decir, quiero aclarar que la decisión del juez no supondrá ningún coste para las arcas públicas", afirmó el primer edil. No dijo más, levantó la sesión, dejó su asiento y, ante la sorpresa del resto de grupos de la oposición, fue recibido entre besos y abrazos por parte de decenas de vecinos que esperaban, expectantes, el fin de la sesión plenaria para recibir al primer edil

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