Un paseo submarino entre los fósiles paleozoicos de Santa Cruz de Nogueras

El Museo de los Mares Paleozoicos inaugura una nueva exposición basada en los hallazgos más espectaculares de fósiles marinos en la región.

Un paseo submarino entre los fósiles paleozoicos de Santa Cruz de Nogueras
Un paseo submarino entre los fósiles paleozoicos de Santa Cruz de Nogueras

Santa Cruz de Nogueras es un pequeño municipio casi escondido en las serranías que limitan las provincias de Zaragoza y Teruel, con poco más de 30 habitantes censados. Sin embargo, en su seno aloja desde hace tres años el Museo de los Mares Paleozoicos, divulgando la riqueza paleontológica de las serranías al sur de la Comarca del Jiloca. Por ella se han interesado científicos de todo el mundo. 


Ahora, el museo saca a la luz una nueva exposición en la que descubre los hallazgos más espectaculares en la región de fósiles de animales marinos, con edades superiores a los 400 millones de años. Se trata de una ampliación de ‘La vida en los mares paleozoicos’, la exposición con la que se inauguró el museo, incrementando en casi una tercera parte los fondos que se expusieron entonces.


“En ella se recogen alrededor de 150 piezas representando más de 70 especies diferentes. Todos ellos son fósiles originales a los que acompañan unas pocas réplicas o recreaciones”, explica Enrique Villas, profesor de Paleontología de la Universidad de Zaragoza y uno de los colaboradores de la exposición. “En realidad no es más que una pequeña muestra de las riquísimas asociaciones de fósiles que se encuentran en las rocas del entorno y que representan, tal vez, el momento de máxima biodiversidad en lo que hoy es Aragón”, continúa el profesor. 


La exposición invita al visitante a sumergirse en las aguas a través de un fondo marino, poblado de extrañas criaturas. Para ello se ayuda de efectos de luz, color y sonido, así como de recreaciones de algunas de las especies más espectaculares que poblaron aquellos mares.


A lo largo del recorrido el visitante puede reconocer, además, los mejores fósiles encontrados en la región a lo largo de la segunda mitad del Siglo XX. "Casi todos ellos pertenecen a animales invertebrados, hoy día totalmente desaparecidos, como los trilobites, graptolitos, tentaculites, cefalópodos de conchas rectas, o corales rugosos y tabulados.


Otros, hoy solo los podemos encontrar refugiados en ambientes fríos y profundos, de muy difícil observación, como los crinoides de largos tallos o los braquiópodos”, relata Villas. Pero también están representados dos grupos de peces muy primitivos, que se extinguieron sin dejar descendientes: los peces acorazados y los peces acantodios”, añade. 


El museo abre los fines de semana, pero también se puede concertar la visita. Está abierto todos los sábados, domingos y festivos de 11.00 a 14.00 horas, y en verano, también los sábados de 15.00 a 17.00 horas. Pero fuera de esos días, también pueden concertarse citas a través del teléfono 605 974 582, el correo electrónico

museosantacruz@hotmail.com o su página de Facebook ‘Museo Mares Paleozoicos’


El precio de la visita guiada es de tres euros, con un precio más reducido para grupos numerosos. También existe la posibilidad de realizar actividades de replicado de fósiles en su taller paleontológico, especialmente los más pequeños, con un pequeño incremento sobre el precio de la visita guiada.


El Museo de los Mares Paleozoicos de Santa Cruz de Nogueras es el primer museo paleontológico en las comarcas del Jiloca y Campo de Daroca. Tiene como objetivo divulgar el patrimonio geológico y natural a partir de la exposición permanente ‘La vida en los mares paleozoicos’ en la que se ilustran los principales grupos de fósiles presentes en las rocas de esa parte de la sierra de Cucalón y sirve para mostrar las características ecológicas de esos ambientes. 


Los vecinos de Santa Cruz de Nogueras están orgullosos de esta riqueza paleozoica y confían en que el museo y sus exposiciones den a conocer su pueblo y animen al visitante a disfrutar de las otras riquezas naturales de sus montañas, con altitudes entre los 900 y los 1500 metros, poblados de encinas, robles y coníferas, habitados por una gran variedad de insectos, reptiles, mamíferos y aves.