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La proximidad empuja a cinco pueblos de la comarca Cuencas Mineras a compartir servicios

En 16 km se encuentran Mezquita de Jarque, Cuevas de Almudén, Jarque de la Val, Hinojosa de Jarque y Aliaga, cuyos vecinos tienen cada vez más vínculos entre sí.

Modesta y Sebastián, en un mirador de Jarque de La Val desde el que se divisa Hinojosa de Jarque.
Modesta y Sebastián, en un mirador de Jarque de La Val desde el que se divisa Hinojosa de Jarque.
M. A. M.

Mezquita de Jarque, Cuevas de Almudén, Jarque de la Val, Hinojosa de Jarque y Aliaga no comparten solo el centro de salud, el secretario municipal y el Centro Rural Agrupado (CRA) de colegios. Los cinco municipios, que juntos no alcanzan los 1.000 habitantes y están situados en un tramo de solo 16 kilómetros de la carretera A-1403, se ayudan entre sí y se organizan para contar con servicios que de otro modo les resultarían más caros o quizá imposibles de disfrutar.

"Aunque cada uno mantiene su identidad, es como si fuéramos un solo pueblo; las sinergias que surgen entre nosotros nos hacen ser más competitivos", asegura el alcalde de Mezquita de Jarque, Herminio Sancho. Este regidor explica que la furgoneta que financia su Ayuntamiento para llevar a los niños al colegio de Cuevas de Almudén está también a disposición de los vecinos de todos los pueblos para que acudan al centro de salud o a comprar si lo necesitan. El mismo sentido comunal tiene la escuela infantil de esta localidad, a la que acuden niños de toda la zona, conocida como La Val.

Sergio Uche, primer edil de Aliaga, sostiene que entre todos los alcaldes y vecinos "existe un vínculo de amistad muy especial". Relata que, para que salgan más baratos, los cursos para aprender el manejo de los desfibriladores instalados en distintos puntos de las localidades han sido compartidos. Además, la cabalgata de Reyes es única para todos los municipios, si bien un año sale de Mezquita de Jarque y visita los pueblos hasta llegar a Aliaga y al siguiente hace el recorrido inverso.

La cooperativa agrícola de Jarque de La Val sirve también al resto de los municipios y el almuerzo que sigue a la asamblea anual se celebra cada vez en un pueblo, "para que todo el mundo se sienta a gusto", dice el alcalde de Hinojosa de Jarque, Andrés Sánchez.

Los cinco municipios, pertenecientes a la comarca Cuencas Mineras, celebran juntos San Jorge, aunque un año en cada pueblo. También tiene un carácter aglutinador el día del Pilar, cuando todos los alcaldes acuden al cuartel de la Guardia Civil de Aliaga para celebrar la fiesta. La piscina de Hinojosa de Jarque es para toda La Val y el gimnasio de Mezquita de Jarque lo mismo, como prueban sus 79 socios, empadronados en las distintas localidades de la zona.

las relaciones son aún más estrechas entre Jarque de la Val e Hinojosa de Jarque, a solo tres kilómetros de distancia y cuyos vecinos pueden ir de un sitio a otro a pie. Los dos pueblos se ponen de acuerdo para que sus fiestas no coincidan y así poder disfrutar de todas ellas. En febrero, Jarque de la Val celebra San Blas e Hinojosa Los Santos. En agosto, la primera festeja San Roque y la segunda, San Agustín.

"En las fiestas de cada pueblo nos involucramos todos", subraya Andrés Sánchez, quien explica que los pregones por megafonía que emiten los ayuntamientos de Jarque e Hinojosa se oyen en las dos localidades, por la cercanía y la falta de ruido ambiental, y lo mismo ocurre con la música de las orquestas festivas. Estos dos municipios comparten hasta el agua, pues ambos se abastecen de una misma fuente, ubicada en Jarque. La proximidad hace que muchos campos de labor pertenezcan a agricultores del pueblo vecino.

"Nos damos calor"

Modesta Pin y Sebastián Iranzo, un matrimonio que reside en Jarque de la Val, explican que se encuentran muy a gusto en el municipio, si bien echan en falta más masa poblacional "para poder hacer amigos". Señalan que hay 100 vecinos censados, pero solo 36 viven en invierno. Dicen que, al menos, la hermandad entre los cinco municipios de La Val hace que aumente la afluencia de gente en actividades lúdicas. "Es como si nos diéramos calor unos a otros", afirma Modesta, mientras muestra la plaza porticada y la torre mudéjar de la antigua iglesia.

Pese a la unión entre las cinco localidades, ninguno de sus alcaldes piensa ni por un momento constituir un solo Ayuntamiento. "Sería un error; es muy difícil ser justo con todos y empezarían los problemas. Queremos conservar nuestra idiosincrasia", asegura Sergio Uche.

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