Miravete de la Sierra, una localidad del Maestrazgo con solo 27 vecinos, está de enhorabuena por el primer nacimiento en más de medio siglo. La pequeña Chloe López Beltrán acaba de nacer en un pueblo en el que, según una exitosa campaña publicitaria de 2008, "nunca pasa nada".

Los padres de la pequeña llegaron a la localidad desde Tarragona atraídos por la abuela, asentada desde hace algo más de un año en la localidad como gestora del multiservicio rural, una fórmula comercial y hostelera promovida por la Cámara de Comercio para garantizar unas mínimas prestaciones en pequeñas localidades sin oferta privada.

El alcalde, José Listo, afirmó que el nacimiento de Chloe después de más de 50 años sin alumbramientos es una noticia "fenomenal" para el pueblo y manifestó su deseo de que la familia -formada ahora por una abuela, los dos padres y la recién nacida- eche raíces en la localidad.

"Los vecinos estamos encantados de la vida con el nacimiento porque el pueblo está muy necesitado de recursos humanos", añadió el alcalde.

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 "Ahora falta que la familia se asiente en el pueblo y su presencia no sea un efecto pasajero", añadió Listo, que adelantó su intención de ofrecer "todo el apoyo posible" a los primerizos padres. Declaró también su deseo de que la familia "se gane bien la vida" y permanezca por largo tiempo en Miravete mientras Chloe crece.

La campaña publicitaria ‘El pueblo en el que nunca pasa nada’ eligió Miravete, precisamente, por su escasa población como ejemplo del impacto que podía tener un lanzamiento publicitario que aprovechaba los recursos de las nuevas tecnologías. La novedosa iniciativa puso de moda a la localidad durante un tiempo, aunque el efecto repoblador fue nulo.