Abascal tiende en Teruel la mano al PP para gobernar y derogar "las leyes socialistas una tras otra"

El presidente de Vox, Santiago Abascal, no ha escatimado reproches al PP en su intervención en el mitin celebrado en la plaza del Seminario de Teruel para arropar al candidato de la formación de extrema derecha a la alcaldía de la capital turolense y a la presidencia del Gobierno aragonés, Alejando Nolasco. Abascal, tras achacar a los populares hacer seguidismo de las políticas del PSOE, les ha "tendido la mano", no obstante, para pactar tras las elecciones del próximo 28 de mayo para gobernar y "derogar, una tras otra, todas las leyes socialistas".

El máximo dirigente de Vox ha criticado al PP por aceptar la Agenda 2030 "como el Evangelio", no defender la lengua española o por no mantener una política coherente respecto a la política del agua. A pesar de sus dardos contra los populares, ha defendido que en caso de que, tras las elecciones locales y autonómicas, las suma de los resultados de PP y Vox sea suficiente ambos partidos se alíen para conquistar los gobiernos de ayuntamientos y comunidades, sea cual sea la lista más votada en las urnas. 

Santiago Abascal se ha dirigido directamente al candidato del PP a la presidencia de la DGA, Jorge Azcón, por haber planteado que gobierne la lista más votada tras los comicios del 28M. Mantener este planteamiento es, según Abascal, "renunciar a ser la alternativa" al PSOE. Para el presidente de Vox, es irrenunciable el pacto entre PP y Vox para acabar con los gobiernos socialistas, aunque la lista conservadora no sea la más votada. Ha puesto como ejemplo de entendimiento el gobierno PP-Vox de Castilla y León. Aunque, por otro lado, ha abogado por la disolución de las autonomías en beneficio de "la España de las provincias".

El discurso de Santiago Abascal, presenciado por una doscientas personas, ha dirigido también duras críticas al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al que ha tildado de "fantoche" por sus pactos con Bildu, formación que incluye en sus listas a "44 terroristas". Para Abascal, Sánchez "no es decente" por haber pactado con Bildu y "con comunistas" después de haber dicho que no lo haría. Las críticas al Gobierno se han extendido a ministras "psicópatas" que han promovido leyes que "sacan a la calle a delincuentes sexuales".

Ha descalificado la política gubernamental en la provincia de Teruel, porque "en época de sequía derriba presas -en referencia a la prevista demolición del pantano de Los Toranes, en Albentosa, que Abascal ha visitado esta mañana- o porque, con problemas de abastecimiento energético, vuela centrales térmicas -en alusión a la voladura de la térmica de Andorra-". 

Respecto a las políticas migratorias nacionales, Santiago Abascal ha culpado al Gobierno de "promover la inmigración ilegal", que trae, como consecuencia, "delincuencia e inseguridad". "Es un gobierno -ha dicho a modo de resumen- que se ha convertido en el enemigo del pueblo español".

Las críticas encendidas de Abascal al estado de las autonomías y a los partidos nacionalistas, a los que ha acusado de "chantajear" al Gobierno central con la "complicidad" del PSOE y el PP, han sido repetidas.

También ha descalificado la labor de Teruel Existe, que fue "decisivo" para aupar a la presidencia del Ejecutivo central a Pedro Sánchez "con Bildu y Esquerra Republicana". Se ha preguntado cuáles son los logros del diputado de Teruel Existe desde 2019, Tomás Guitarte, porque "no ha servido para impedir la demolición de la presa de los Toranes o para atraer más inversiones a la provincia".

Alejandro Nolasco ha criticado, por su parte, las políticas del Gobierno aragonés en materia sanitaria, impositiva y de infraestructuras. Ha advertido de que los problemas que soporta la provincia son similares a los del resto del país en cuanto a envejecimiento, "ecologismo radical" y falta de oportunidades. Ha coincidido con el presidente de Vox en que no es admisible la demolición de la presa de los Toranes en plena sequía o de la central térmica de Andorra. Ha criticado asimismo el despliegue de energías renovables por falta de planificación y ha cuestionado el papel de las comarcas por su coste político.