teruel
Un libro recupera la memoria de la línea férrea Val de Zafán medio siglo después de su cierre
El recorrido, que unía el Bajo Aragón con Tortosa, es hoy un camino próximo a completarse como vía verde
Se cumple medio siglo del cierre del ferrocarril de Val de Zafán, que partía de La Puebla de Híjar y recorría todo el Bajo Aragón Histórico para desembocar en Tortosa (Tarragona). Y en esta efeméride, un libro colectivo coordinado por el historiador de Cretas Juan Luis Camps recorrerá de nuevo este trazado a través de fotografías, descripciones de las máquinas que prestaron servicio y, sobre todo, multitud de recuerdos de los vecinos del Matarraña, protagonistas de la historia.
Fue el 19 de septiembre de 1973 cuando el hundimiento de un túnel entre las estaciones tarraconenses de Prat del Compte y Pinell de Bray precipitó la desaparición de un proyecto pionero de vía férrea más pensado para el transporte de mercancía que de pasajeros. Cincuenta años después, este recorrido, ya convertido en un camino natural, está siendo acondicionado tramo a tramo como vía verde.
"Habrá cuatro capítulos básicos, partiendo de las primeras propuestas de línea en la segunda mitad del siglo XIX", resume Camps, "y seguirá con la construcción de la infraestructura ya en el siglo XX y sus 40 años de explotación". El recopilatorio reivindica el largo trabajo que supuso su impulso, las grandes ilusiones que traía consigo y las expectativas de desarrollo que preveían los municipios.
Aún hoy Camps ve en esta línea algo de esperanza incompleta, de historia prematuramente interrumpida que advierte en los actuales proyectos de recuperación ambiental, "pero sería mejor que el tren funcionase", subraya. Ahora, Val de Zafán entronca con las sendas cicloturistas entre el Matarraña y la Terra Alta y la DGA pretende extender estos tramos hasta Teruel. Reconoce Camps que, al menos, estos proyectos están recuperando y dando uso a las antiguas estaciones.
De hecho, el Ministerio de Agricultura acaba de comunicar al Ayuntamiento de Alcañiz el encargo realizado a la sociedad pública Tragsa para que acometa las obras de acondicionamiento en el tramo que va de Alcañiz a Valdealgorfa. Son 18 kilómetros que precisarán de una inversión de más de un millón de euros que incluirá la remodelación de las estaciones y edificios ferroviarios de Alcañiz y Valdealgorfa.
La inclusión del Túnel del Equinoccio en este tramo ha sido la última petición del Ayuntamiento, que encontró en el Ministerio de Agricultura una respuesta favorable. El túnel, por el que cruza el sol cada primavera y otoño conformando un espectáculo que tiene cada vez más seguidores, quedará iluminado y señalizado y tendrá una anchura de entre 5 y 5,5 metros.
