El nuevo hospital de Teruel, que sustituirá al obsoleto Obispo Polanco, está ya construido en casi un 60%. La obra, iniciada en febrero de 2019, ha sufrido contratiempos que han demorado su desarrollo, pero en la actualidad avanza "a buen ritmo", según el Gobierno aragonés, por lo que la Administración autonómica mantiene finales de 2023 como fecha de terminación del edificio.

Cuestión aparte será la entrada en servicio de las instalaciones, pues tras la finalización de las obras se abrirá la fase de equipamiento. Además, como informan desde la DGA, será necesario que el Ayuntamiento de Teruel realice una modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para poder expropiar terrenos y licitar la construcción del vial que unirá la ciudad con el nuevo hospital, trámites que durarán unos 9 meses. A continuación, habrá que ejecutar estos accesos.

La zona más avanzada es la de hospitalización, con sus fachadas ejecutadas en un 90%, los tabiques interiores terminados, la colocación de carpinterías de aluminio en marcha y 12 ascensores –un 40% del total del hospital– instalados. También va rápida el área de Consultas Externas, con las fachadas al 80%, los pavimentos terminados, la fontanería y saneamiento al 60% y la tabiquería al 50%. Mucho menor es el nivel de ejecución de la zona que albergará los servicios de Diagnóstico por Imagen, Laboratorios, Urgencias y Quirófanos, construida solo al 20%.

Como dato general, el Gobierno aragonés destaca que las cubiertas del edificio del nuevo hospital de Teruel están terminadas en un 98%. Los casetones que albergarán las máquinas de climatización y los grupos electrógenos están igualmente muy avanzados, al 80%, y falta colocar las placas fotovoltaicas. También la urbanización interior de la parcela ha comenzado con los movimientos de tierras de la excavación del parquin sur.

De los 86,3 millones de euros que costará el nuevo hospital, levantado a unos cuatro kilómetros del casco urbano de Teruel, en la zona conocida como El Planizar, se han gastado ya 51,9 millones. Solo durante 2022, las obras realizadas tienen un valor de 16,2 millones de euros.

Desde el Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón explican que la ejecución de las obras sufrió las consecuencias de los confinamientos y limitación de la movilidad por causa de la pandemia de coronavirus durante 2020. Entre 2021 y 2022, las rupturas en las cadenas de suministros ralentizaron también los trabajos.

La estructura del nuevo hospital fue finalizada en septiembre de 2020. Tras ser recibida esta obra, debía haber comenzado el cerramiento, la albañilería y las cubiertas, pero el adjudicatario de este lote se negó a iniciar los trabajos, obligando a realizar una nueva licitación de este paquete de obras y un ajuste en la dinámica de ejecución del resto del edificio.