teruel
Los agricultores de El Plano de Alcañiz proyectan instalar placas solares para abaratar los riegos
La subida del precio de la energía eléctrica triplica el coste del bombeo de agua desde el embalse de Calanda hasta 4.300 hectáreas de cultivo
Los agricultores de la zona de El Plano de Alcañiz, que desde hace más de dos décadas riegan sus campos bombeando agua desde el embalse de Calanda, proyectan instalar placas solares para generar su propia energía eléctrica y abaratar el coste de la irrigación.
El presidente de la Comunidad de Regantes del Canal Calanda-Alcañiz, José Miguel Ayuda, alerta de que la subida del precio de la luz triplica el coste de los riegos. Según explica, cada agricultor ha estado pagando hasta ahora 300 euros por hectárea al año para que el agua llegue a sus campos, pero las nuevas tarifas de energía eléctrica, que los propietarios tendrán que asumir ya este verano para hacer frente a la campaña de riegos, elevarán la cuantía hasta los 900 euros.
“Es un gasto inasumible para nosotros, sobre todo cuando también ha subido el gasoil, los insecticidas, los abonos y las semillas”, se queja Ayuda. El presidente de los regantes admite que el cereal de invierno –trigo y cebada–, principal cultivo en la zona, atraviesa una buena época, al pagarse a 300 euros la tonelada frente a los 200 euros de hace solo unos meses. “Pero esa subida no es del triple, como sí ha ocurrido con la luz”, puntualiza.
La comunidad ha contactado con empresas dedicadas a la instalación de parques fotovoltaicos para conocer cuánto costaría poner en marcha un número de placas solares adaptado a las necesidades de los agricultores. "Sabemos que con las renovables tendríamos la energía eléctrica a un precio más asequible y, sobre todo, estable", subraya Ayuda. El presidente de la entidad destaca que el importe que la asociación abona anualmente por el bombeo ya es reseñable, pues asciende a un millón de euros.
Las placas solares se instalarían en la zona en la que se encuentra la maquinaria de bombeo. El agua del pantano llega hasta El Plano a través del Canal Calanda-Alcañiz. Almacenada en una balsa de recepción, desde allí se impulsa mediante energía eléctrica hasta un segundo estanque a mayor altura, desde el que se distribuye por un total de 4.300 hectáreas de cultivo mediante sistemas de riego por goteo o aspersión.
Ante las dificultades económicas por las que atraviesa el campo, los 500 agricultores que obtienen su cosecha con agua del Canal Calanda-Alcañiz han ido variando sus cultivos con el fin de obtener una mayor rentabilidad en sus explotaciones. Un 80% de la superficie de El Plano estaba plantada inicialmente de maíz, pero la caída de los precios hace 4 años llevó a muchos propietarios a sustituir este cereal, que tiene un elevado coste de siembra, por trigo y cebada. En menor medida, hay almendros, olivos y melocotoneros.
En los dos últimos años, como cultivo alternativo, unas 60 hectáreas se han destinado a la producción de colza para semilla, un producto que se paga a mejor precio que el maíz y que ha teñido en primavera de amarillo intenso los campos más próximos a la carretera N-420 a su paso por los terrenos de El Plano en su discurrir entre Teruel capital y Alcañiz.
