Ángel Loras: "La mejor medalla es saber que la niña que reanimé está bien"
El Inspector de la Policía Local nacido en Teruel hace 46 años. Ha recibido la primera Medalla al Mérito Policial con distintivo amarillo creada por la DGA
Acaba de recibir la primera Medalla al Mérito Policial de Aragón con distintivo amarillo por una acción "sobresaliente". ¿En qué consistió?
Fue por salvar la vida de una bebé de un mes y 10 días.
¿Cómo fue su intervención?
El pleno temporal Filomena -en enero de 2021-, un sábado que nevaba, trabajábamos a tope las policías Local y Nacional cuando me llamó por teléfono un compañero para decirme que fuera rápido a la plaza del Labrador, en el barrio del Arrabal, porque se ahogaba un niño. Con todas las calles nevadas, no sé ni cómo pudimos llegar al lugar.
¿Y qué panorama se encontró al llegar?
Entramos en una casa en la que vivía una familia marroquí. El padre tenía en brazos a la niña, que estaba cianótica, con el color de la piel azul y sin respiración. Se la cogí de los brazos, le abrí la boca y le saqué un plástico que se había tragado y que tenía en la garganta. La reanimé y empezó a cambiar de color tras un quejido.
¡Qué bien le vino ser, a la vez que policía, enfermero!
Sí, soy enfermero, especializado en emergencias.
¿Salvar a aquel bebé estableció un vínculo personal con él?
En otras ocasiones similares sí que se establece esa relación, pero, por desgracia, no he podido mantener la comunicación con aquella niña porque la familia se mudó y la relación se interrumpió.
¿Cómo se sintió tras conseguir reanimar a la pequeña?
Quiero destacar que la intervención fue de equipo. Tras la reanimación, entregué la bebé a una compañera policía nacional en prácticas, que la envolvió en una toalla, y los dos nos subimos en un todo terreno para salir disparados hacia el hospital Obispo Polanco. Al llegar, la niña quedó en manos del equipo médico de urgencias que comprobó que no había sufrido ninguna secuela.
¿Es la actuación policial de la que se siente más orgulloso?
Me siento satisfecho del trabajo que hice, pero estoy orgulloso de la labor diaria. Me hice policía por convicción personal de servicio al ciudadano. Estoy en la Policía Local para servirle.
¿Se siente recompensado por su intervención con la bebé al recibir la primera Medalla al Mérito Policial con distintivo amarillo de Aragón?
La mejor recompensa es que esa niña está bien. Es la mejor medalla que puedo recibir. Pero también digo que es grato que te reconozcan tu trabajo.
Y más si el reconocimiento es, como en este caso, en su ciudad.
Sí, agradezco ese reconocimiento.
¿Por qué decidió hacerse policía local?
Creo que nací siendo policía. Mi padre fue policía y lo llevo en la sangre. Recuerdo que de pequeño iba a verlo en su trabajo y le decía que quería ser como él.
¿Tiene la sensación de que la Policía Local es la pariente pobre de las fuerzas de seguridad?
Todas las fuerzas de seguridad estamos en el mismo barco. El policía que se considere por encima o por debajo de otro compañero de las fuerzas de seguridad no es digno de llamarse policía.
Actos públicos como el celebrado en Teruel por el presidente de la DGA, Javier Lambán, para entregar las medallas del Mérito Policial ¿ayudan a un mayor reconocimiento social?
Por supuesto. La Policía Local está al servicio del ciudadano. No estamos para denunciar, como se ha dicho en ocasiones, sino para servir a la población. En la pandemia se demostró la importante labor de las policías locales y también en el día a día, con mucha cercanía al ciudadano.
¿Qué rasgo distingue a la Policía Local respecto de la Nacional o de la Guardia Civil?
Somos un cuerpo muy cercano al ciudadano. Incluso estando de paisano, los vecinos me cuentan sus problemas en busca de soluciones. Eso no pasa en otros cuerpos.
