Teruel
La alternativa en bus por el corte de la vía alargará el viaje Zaragoza-Valencia 50 minutos
La entrada de los vehículos desde la A-23 a los apeaderos para recoger pasajeros –del 19 de noviembre al 3 de diciembre– ralentizará el trayecto
El transporte alternativo en autobús con el que Renfe garantizará el desplazamiento de sus viajeros entre Zaragoza y Valencia a través de Teruel del 19 de noviembre al 3 de diciembre, cuando la vía estará cortada por obras, podría tardar hasta 50 minutos más que el tren en hacer este recorrido. Así, el usuario que saque su billete para ir de la capital aragonesa a la levantina -con una distancia de 362,300 kilómetros-, deberá tener en cuenta que las cinco horas y veinte minutos que cuesta ahora realizar el trayecto pueden alargarse hasta más de seis horas.
Así lo explica el responsable de Servicios de Cercanías de Zaragoza y Media Distancia en Aragón, Rafael Lázaro, quien destaca que, aunque el recorrido alternativo por la autovía Mudéjar o A-23 es rápido, la necesidad de los autobuses de desviarse de esta vía de gran capacidad para entrar a recoger pasajeros en todas o en alguna de las 28 estaciones intermedias que hay entre Zaragoza y Valencia demora el viaje. "A veces, es imposible cumplir con el horario de los trenes", afirma Lázaro.
Por si fuera poco, las carreteras locales que conducen a los apeaderos ferroviarios suelen ser estrechas y no todas presentan un buen estado de conservación. De hecho, las dimensiones y características de estas vías condicionan a Renfe a la hora de poner al servicio de los pasajeros un vehículo, pues este podrá ser de gran volumen si el tramo es amplio, o bien deberá ser un microbús si la vía es estrecha.
Lázaro destaca que, cuando el Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) comunica a Renfe la necesidad de cortar la vía del tren por obras o con motivo de alguna incidencia, se pone en marcha todo un engranaje para poder organizar en pocos días un transporte alternativo. Dos oficinas de Planificación, las de Zaragoza y Valencia, se han puesto a trabajar en este caso para que desde las doce de la medianoche del próximo viernes y en las dos semanas siguientes el servicio de transporte por carretera se realice sin problemas. El corte por obras se circunscribe al tramo Caminreal-Valencia, pero la medida afecta a todos los viajeros cuyo destino se encuentre entre esas dos localidades.
La situación, que requiere contratar el servicio de bus con una empresa de transporte, obliga también a reajustar la plantilla de ferroviarios.
El corte afecta igualmente a los trenes de mercancías que circulan entre Zaragoza y Valencia, a los que se les ofrece desviarse por Tarragona o Madrid.
La línea quedará sin limitaciones de velocidad
Las obras que Adif va a realizar a partir del próximo viernes en la línea Zaragoza-Teruel-Valencia permitirán suprimir las tres últimas limitaciones temporales de velocidad (LTV) que quedan en el recorrido. En total, las actuaciones del Plan Director para la modernización de la infraestructura, iniciadas hace 4 años, habrán eliminado 18 LTV de este recorrido.
Expertos del sector ferroviario calculan que la eliminación de las 18 limitaciones de velocidad debería traducirse, al menos teóricamente, en un ahorro en el tiempo de viaje de entre 36 y 54 minutos, a razón de una media de dos a tres minutos de ganancia por cada limitación suprimida.
No obstante, habrá que esperar a que las obras concluyan y a que los terraplenes en los que se ha intervenido se estabilicen para ver qué velocidades de trenes se establecen en el recorrido Zaragoza-Teruel-Valencia. Las mismas fuentes destacan que también el material ferroviario influye en los tiempos del viaje.
