La Diputación de Teruel (DPT) prorroga los plazos para solicitar el cambio de finalidad de las inversiones de las convocatorias del primer Plan de Obras y Servicios (POS) para barrios y núcleos principales de población, así como su consiguiente ejecución y justificación. Responde así a los dificultades que algunas localidades han manifestado a la hora de contratar y ejecutar las obras solicitadas previamente, con el objetivo de que todas ellas se puedan beneficiar de los planes de cooperación.

El presidente de la DPT. Manuel Rando, ha firmado este martes el decreto por el que el plazo para solicitar cambios de finalidad de las obras, que concluía hoy mismo 15 de septiembre, se amplía hasta el 15 de octubre. Además, el plazo de ejecución pasa del 30 de noviembre al 30 de diciembre, la misma fecha que el plazo de justificación.

“Son casos contados, principalmente por problemas que han surgido por falta de empresas o mano de obra, fundamentalmente en la construcción, y que en ningún caso son responsabilidad de los ayuntamientos”, ha explicado el presidente Rando antes de añadir “no podemos permitir que algún municipio o barrio pierda estas cantidades extraordinarias, que tan necesarias son, por estas dificultades” y apuntar que, en todo caso, esta prorroga solo se aplicará “para casos debidamente justificados”.

El decreto de prórroga de los plazos del POS 2020 establece específicamente que la petición de prórroga para el plazo de ejecución y justificación responderá a causas no imputables a la entidad local y “deberá acreditarse mediante declaración del Alcalde-Presidente (…) y certificado del Secretario o Secretario-Interventor”.

Hasta primera hora de hoy, 15 de septiembre, el que inicialmente era el último día del plazo para cambiar la finalidad de las obras de los primeros POS para municipios y barrios, habían llegado siete solicitudes. Manuel Rando ha insistido en que, aunque el problema de contrataciones existe, “no es algo generalizado y la inmensa mayoría de las peticiones para recibir las cantidades preasignadas se están resolviendo con normalidad, por lo que este cambio va dirigido a unos casos muy concretos y siempre con la intención de no dejar a nadie sin nada”. 

Un portavoz de la patronal de la construcción, Pedro Rodríguez, explicó recientemente que las empresas desisten de concurrir a los concursos de obra pública por la escasez de mano de obra y también porque los presupuestos de los proyectos se han quedado desfasados ante el acelerado encarecimiento de los materiales en los últimos dos años. La pujanza del mercado inmobiliario podría ser otro de los motivos de que las licitaciones de pequeñas obras públicas queden desiertas.