La Junta Local de Seguridad de Calamocha, presidida por el subdelegado del Gobierno en Teruel, José Ramón Morro, y por el alcalde de la ciudad, Manuel Rando, se ha reunido la mañana de este jueves con objeto de coordinar las actuaciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de cara a los días en los que tradicionalmente se celebrarían las fiestas de San Roque, suspendidas por segundo año por la situación sanitaria. 

El acto más característico de las fiestas patronales anuladas es el baile de San Roque, una multitudinaria danza que interpretan dos filas de danzantes que recorren las calles de la localidad mientras se recitan los "dichos" que repasan la actualidad local y nacional con un toque de ironía.

Al igual que en 2020, se mantendrá el mismo operativo policial que en años anteriores, con el objetivo de evitar aglomeraciones y asegurar el cumplimiento de las medidas sanitarias en vigor en la Comunidad Autónoma. Habrá refuerzo de la seguridad con controles de alcoholemia y drogas, una mayor presencia de los agentes en las calles y vigilancia en las peñas para evitar botellones. 

El subdelegado ha pedido “responsabilidad ciudadana” para evitar incidentes. Entre los participantes en la Junta de Seguridad, han figurado, además de los responsables de la Subdelegación y el Ayuntamiento, el delegado territorial de la DGA, Benito Ros, y representantes de la Guardia Civil y los bomberos.